Este fin de semana ha tenido lugar en París la sexta y última parada del circuito de la World Challenge Cup, copa del mundo por aparatos no clasificatoria para los Juegos Olímpicos de Tokio. Esta vez ha sido el equipo masculino el que ha representado a España.
Chusovitina sigue siendo la mejor
Una rutina estratosférica en suelo del japonés Kazuki Minami sirvió para abrir la lata de las medallas. Artem Dolgopyat no puede ganar siempre, esta vez dio un gran paso en la pirueta enlazada con la doble pirueta y media y bajó una posición con respecto a la semana pasada en Szombathely. El ruso Kirill Prokopev estuvo correcto, excepto en su primera diagonal, una pirueta más doble pirueta y media, que se quedó baja. En esta final también participó el español Ray Zapata, que fue sexto por culpa de un gran paso que le obligó a sacar el pie en el doble en plancha de salida.
En salto femenino, Oksana Chusovitina demostró que está lista para sus octavos Juegos Olímpicos, a los que acudiría con 48 años. La uzbeca ganó con una paloma con mortal adelante extendido con pirueta y un Tsukahara extendido con pirueta y media. Segunda fue la húngara Sara Peter con un Yurchenko doble y una paloma con mortal adelante extendido con media pirueta. Y completó el podio la chilena Franchesca Santi con un Yurchenko doble en el que sacó el pie y un buen Tsukahara con pirueta.
La final de caballo con arcos de París fue para olvidar debido a las numerosas caídas. Logró salvarlas el británico Joshua Nathan, que suma su segundo oro en dos semanas, tras vencer también en Szombathely. Y lo hizo gracias al nivel de dificutad de su ejercicio, pues la postura corporal no llegó a ser del todo correcta. Más limpio, pero más sencillo, estuvo Prokopev, que se llevó la plata. El bronce fue a parar al cuello del canadiense Thierry Pellerin.
De Jesus sumó el primer metal local
Mélanie de Jesus dos Santos, la actual campeona de Europa, dio el primer oro a los anfitriones con unas geniales asimétricas: limpia, bien colocada, con ritmo y una salida clavada. Segunda, la rusa Anastasiia Agafonova, a la que en algunos momentos le faltó ritmo. Tercera, la húngara Zsofia Kovacs.
En anillas se dio un hecho curioso: el egipcio Ali Zahran y el francés Samir Aït Said, ambos especialistas, obtuvieron notas calcadas, coincidiendo tanto en dificltad como en ejecución. Ante el completo empate, ambos compartieron el oro. Y el bronce fue para el nipón Kentaro Yunoki, que clavó el doble agrupado con doble pirueta de salida.
Dos españoles en salto, una medalla
La segunda jornada comenzó con el salto masculino, que se metió en el bolsillo el francés Loris Frasca con un gran Kasamatsu doble y un imponente Dragulescu, aunque en ambos tuvo que dar un paso atrás. El británico Jake Hartman emuló a Frasca con otro buen Kasamatsu doble, aunque sacó un pie en el Yurchenko doble. Quien también sacó el pie en el Yurchenko doble fue Adriá Vera, pero eso no le impidió colgarse la medalla de bronce, pues sus dos saltos fueron ejecutados con gran corrección. La mala suerte no dejó en paz a Zapata, que en esta ocasión fue quinto al poner las manos en el Roche y dar varios pasos atrás en el Tsukahara doble en carpa.
Anastasiia Agafonova sí pudo ganar en barra. La rusa entró en posición de vela, tuvo un pequeño desequilibrio en la zancada al anillo, completó con soltura sus series acrobática y gimnástica, sorprendió con un mortal adelante agrupado de gran belleza y salió con un doble agrupado. La ucraniana Anastasiia Bachynska fue segunda, aunque su ejercicio sumó numerosas impresiciones. Quien presentó el mejor ritmo de todas fue la otra ucraniana, Diana Varinska, que fue tercera con un combo de inversiones adelante, una zancada al anillo y un mortal lateral, terminando con una doble pirueta.
Un nivel muy dispar en una final de paralelas atípica. Mientras que el japonés Kaito Sugimoto completó un gran ejercicio en el que destaca el Sasaki, el ruso Sergei Elstov casi cae de bruces en la salida y el húngaro Ryan Sheppard golpeó su cadera contra la barra en el healy y luego otra vez en el Makuts. Un punto y medio de diferencia entre el oro y el bronce evidenció una falta de armonía en dicha final.
Fin de fiesta en París
Gran variedad, esta vez de estilos, entre las medallistas de suelo. Diana Varinska, oro, elegante y delicada, con una pirueta a triple pirueta, doble giro en L, doble pirueta y media a mortal agrupado adelante y doble agrupado de salida. Marine Boyer, plata, potente y decidida, con una doble pirueta a mortal adelante, doble agrupado y doble carpado. Aneta Holasova, bronce, graciosa y dinámica, solo le falló un pie fuera en el arabian doble.
Un fin de fiesta amargo para elequipo español en París, pues Néstor Abad hincó las rodillas en su salida de la barra tras un ejercicio muy limpio, terminando octavo. Las medallas quedaron para el croata Tin Srbić, con un triple enlace de Tkachevs muy lucido; Sergei Elstov, con un gigantesco combo de Cassina, Kovacs carpado, Kolman y Kovacs agrupado; y el taiwanés Chia-Hung Tang, con un Tkachev a Tkachev con agarre cruzado.
El equipo español, en forma para el mundial
Con un bronce y cuatro presencias en tres finales, el equipo masculino acude bien preparado al mundial de Stuttgart del próximo mes. Por su parte, el equipo femenino ha sido segundo en una competición amistosa contra selecciones como Suiza o Países bajos, además de las dos medallas que sumó la semana pasada en Hungría.
Pueden consultarse aquí los resultados completos de las finales.
Imagen destacada vía ffgym.fr
Fotos vía ffgym.fr
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