Llegó el día, se jugó la final femenina del USOpen y Bianca Andreescu de 19 años le ganó a Serena Williams en dos sets, en un partido donde mostró una madurez increíble, a diferencia de la estadounidense, que volvió a mostrar una versión muy pobre.
Andreescu, en su primera presentación en el cuadro principal del Abierto de Estados Unidos, se impuso por 6-3 y 7-5 en el estadio Arthur Ashe y se quedó con un duelo generacional en el que batió a una rival de 37 años.
Solo Serena sabrá lo que pasa en su mente, pero van 4 finales de Grand Slams y ninguna ha podido ganar, es evidente que se está tornando una pesadilla la exigencia de lograr el título número 24, y es que desde el comienzo el encuentro, toda esa presión se hizo presente, Serena tuvo que trabajar para remontar un quiebre temprano, cosa que nunca logró y que a partir de esa frustración, su juego se tornó carente de confianza, muchos errores no forzados y un tenis sin claridad. Andreescu supo leer el partido y con un tenis agresivo logró superar el set por 6-3.
El segundo set comenzó de igual forma, Serena Williams se veía en pista sin rumbo y derrotada moralmente, no era capaz de encontrar la manera y con el marcador 5-1 y a punto de morir, Serena tiró el corazón en la cancha, la lucha que debe estar presente en una leyenda como ella, la historia de una de las más grandes deportistas en la historia, logró igualar el marcador a 5-5, pero Bianca demostró que a su corta edad tiene una mente de una jugadora mayor, porque no dejó que el estadio de tenis más grande del mundo con miles de fanáticos apoyando a su rival se la comieran viva, logró defender su servicio y en el siguiente logró quebrar a Serena que por el contrario, su mente poco a poco se va apagando, entregando el set definitivo por 7-5.
La flamante campeona, que en la temporada pasada había perdido en la primera ronda de la qualy del certamen, había terminado en el puesto 178 del ranking en el 2018. A partir de este lunes, subirá hasta el quinto escalón.
Además, se convirtió en la primera canadiense en ganar un torneo mayor y la primera menor de 20 años desde que Maria Sharapova levantó el trofeo.
Para Serena Williams no quedará más que seguir intentando, y ojalá que lo siga haciendo.
Imagen destacada: Twitter @usopen
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