Lo que era una noche en el liderato, gracias al empate entre Tenerife y Osasuna, se convirtió en una semana como líder en solitario. Algo histórico para el Lugo. Un momento para disfrutar sin dejar de lado la filosofía del trabajo duro, y sin perder de vista el objetivo claro y primordial que no es otro que la salvación.
Con 23 puntos en su casillero, el Lugo, en su séptima temporada en la categoría de plata, sexta consecutiva, aventaja en un punto al Sporting de Gijón y en dos a Osasuna. Antes de esta temporada, el Lugo había sido segundo en seis ocasiones: cuatro la temporada pasada (jornadas 6, 8, 9 y 10) y dos en la 2013-14 (la 11 y la 12).
El equipo gallego se ha situado en lo más alto de la tabla en el primer curso con Francisco Rodríguez como entrenador. Un entrenador que, al igual que la afición, abogó por hacer “fotos a la tabla”, que es histórica para los gallegos, y al mismo tiempo, “mantener los pies en el suelo y ser humildes”. Una humildad y trabajo duro que definen ese Espírit0 Loitador del conjunto amurallado.
No hay que olvidar que el inicio de curso no fue el mejor y que ahora, aún siendo líderes, se sigue siendo un equipo poco anotador. Pero hoy no es día para mirar lo menos bueno sino para disfrutar de un liderato que, si bien es anecdótico a estas alturas de campeonato, sabe a gloria.
El equipo ha llegado hasta ahí a base de trabajo duro semana a semana, siendo un bloque unido y compensando esa carencia ofensiva con una solidez atrás que lo convierte en uno de los equipos que menos encaja.
Los 23 puntos que ahora hacen líder al conjunto albivermello son vistos por club y afición como un paso enorme en 12 jornadas para el objetivo de mantener la categoría un año más.
En ese sentido el míster fue claro es sus declaraciones tras la victoria ante el Nàstic. “Hay que echar foto a la clasificación y a partir de ahí trabajar. Tengo claro que los jugadores saben dónde están y qué es lo que queremos. Ninguno se va a relajar y ninguno va a ir a Oviedo a ver qué pasa. Hay un compromiso enorme por ser un equipo valiente, pero desde el trabajo y desde la humildad. Lógicamente nadie nos va a parar para seguir creciendo. Vamos a seguir intentándolo. Como te digo, vamos a echar una foto hoy a la clasificación y el martes la esconderemos y la guardaremos para el recuerdo.”
El míster ha resaltado su alegría por esta histórica situación después de haber superado los resultados de las primeras jornadas: “Hay que estar muy contentos y muy satisfechos porque el equipo en las tres primeras jornadas llevaba un punto y no llevaba ningún gol a favor. Desde la tranquilidad, desde saber que estábamos haciendo las cosas bien y desde saber desde el primer día que este equipo está en un proyecto bonito e ilusionante para todos. Para mí, mi máximo objetivo es seguir enganchando gente al Anxo Carro, que cada vez venga más gente a vernos y se sienta identificada con el proyecto y ojalá podamos ir consiguiendo eso, que es importante para la ciudad.”
Una racha positiva de resultados que llega merced a una de las cualidades que exige el técnico andaluz a su equipo, la regularidad: “Al final los que equipos que van a estar arriba, serán los equipos regulares. Nosotros tratamos de ser un equipo regular. Repito, no sin dejar de ser el Lugo y tener una identidad clara: ser un equipo con iniciativa y que domine el balón. Pero con eso no nos basta. Tenemos que apostar también por defender, por ser un equipo intenso, por ser un equipo difícil de superar en todos los duelos y la verdad que lo estamos consiguiendo. Es un placer ver al equipo sin balón y eso es importante en esta categoría.”
Francisco ha insistido en la necesidad de disfrutar el momento, para luego afrontar la preparación del choque ante el Oviedo: “Hay que disfrutarlo y hay que vivir el momento. Tenemos dos días de descanso y es el momento para que los jugadores disfruten con los suyos, con su familia y que descansen. El martes volveremos a lo mismo: a pensar quién somos, dónde queremos ir y de qué manera queremos hacerlo. Desde nuestra humildad vamos a seguir intentando crecer y disputar el partido de Oviedo.”
El entrenador albivermello ha hecho hincapié en la unión que ha mostrado el equipo en los tramos complicados del partido: “El equipo cuando ha tenido que jugar bien en la primera hora, la gente ha disfrutado. Hemos tenido ocasiones de gol y hemos tenido posesión. Aparte de eso, cuando el equipo tiene que sufrir, se une y sufre. Porque al final toca eso. La categoría requiere estas cosas y nosotros estamos dispuestos a llevarlas a cabo. De momento van saliendo y en los últimos cuatro partidos hemos encajado dos goles de penalti y mantenemos la puerta a cero en muchos de ellos. Nosotros siempre vamos a estar cerca de marcar y es importante eso.”
