Empate sin goles en Cornellà-El Prat en un partido vibrante donde el Español acabó perdonando en exceso y donde el Levante consiguió un meritorio empate no exento de polémica.
El partido arrancó con un ritmo trepidante. Eran los locales los que parecía que querían hacerse con el mando del partido ante un equipo levantinista que aceptaba el guante e iniciaba el partido presionando la salida de balón del equipo local. La primera aproximación de peligro vino del bando visitante que tras una peligrosa contra se encontraron con una situación de 3 contra 2 que no supieron materializar con acierto. Cada vez que el equipo blanquiazul lograba superar la primera línea de presión conseguían hacer daño a una defensa adelantada y a un equipo rival que sin presión a balón, concedía las mejores ocasiones de los locales en balones a la espalda de los centrales que aprovechaban continuamente Gerard Moreno, Leo Baptistao y un Jurado que dispuso de una gran ocasión que rechazó el portero levantinista Raúl y que Baptistao no acertó en su finalización mandando el balón por encima de la portería rival.
Por su parte, el Levante encontraba las mejores situaciones de peligro cuando lograba aparecer por la zona de 3 cuartos. Ahí supo filtrar con acierto pases a la espalda de la línea defensiva rival que y que en una de ellas a punto estuvo de costar un disgusto a la parroquia local. Destacar la lesión del jugador rival Doukoure que tuvo que ser substituido antes de acabar el primer tiempo.
Primera parte con alternancia en el control del juego.
En la reanudación todo cambió. Fue el Español el que decidió llevar el peso del partido ante un Levante bien organizado defensivamente. Piatti y Baptistao aprovechaban continuamente los aclarados que Gerard Moreno les proporcionaba en banda para aparecer con peligro y filtrar peligrosos centros que no encontraban rematador o bien, el remate se perdía en el intento. A medida que el partido iba avanzando, el equipo local encontraba cada vez más situaciones de peligro. Quique modificaba el equipo dando entrada a gente de refresco y precisamente uno de ellos, Sergio García, dispuso de una clara ocasión después de ganar la espalda al defensa rival y cruzar un disparo que una vez más rechazó el portero rival y que Baptistao, como ya hiciera en la primera parte, mandó otra vez a las nubes. En pleno acoso y derribo local, Sergi Darder se sacó un misil de la chistera que tras impactar en un jugador rival se envenenó estrellándose en el larguero. Sergio García recogió el rechace y tras el intento de remate fue el portero visitante Raúl el que una vez más estuvo espléndido resolviendo la situación de peligro.
El partido estaba cada vez más decantado del bando local y no exento de polémica. En los minutos finales y tras un preciso centro desde la banda izquierda, Gerard Moreno consiguió conectar un certero cabezazo que acabó en el fondo de las mallas. Undiano Mallenco, tras conceder el gol reculó anulándolo al considerar que había falta previa en el salto.
El Levante se contentaba con el empate y de ahí al final, continuas pérdidas de tiempo y pragmatismo en su juego.
Empate a cero que deja a ambos equipos con un regusto diferente. El equipo de Quique Sánchez Flores con la sensación de perder 2 y al de Juan Ramón López Muñiz con la de ganar 1. Ambos equipos quedan instalados en la parte media de la tabla con 9 y 10 puntos respectivamente.
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