Partido adelantado de la segunda jornada de la recién estrenada Liga Guerreras Iberdrola, disputado en el Polideportivo Bidebieta, y en el que el Rocasa ACE Gran Canaria ha dado un golpe sobre la mesa al vencer al Super Amara Bera Bera por 29-34, resultado que pudo haber sido más amplio a no ser porque las guipuzcoanas consiguieron reducir la ventaja de hasta 8 goles de la que disfrutaron las isleñas (22-30).
No ha sido la tarde-noche de las de Montse Puche. Nada ha funcionado con finura, desde la portería —francamente desconocida—, pasando por una defensa “blanda”, muy lejos de lo que Bera Bera nos tiene acostumbrados, y finalizando por un ataque en el que las pérdidas de balón han sido la tónica a lo largo de los 60 minutos. Además, habría que añadir las bajas de Arrojería y Karsten.
Las canarias, bien dirigidas por Schuster y encomendadas a la efectividad de Lusson, sacudían con fuerza la retaguardia de las locales, donde la 6:0 ordenada por Puche hacía aguas por todas partes. En defensa, y con la inestimable aportación de la gran Silvia Navarro, no permitían demasiadas florituras, salvo las acciones brillantes de Silvia Arderius y algunas más de Maitane Etxeberria, que no eran suficientes para contrarrestar el buen hacer de las de Antonio Moreno.
Las excesivas pérdidas locales, muchas de ellas propiciadas por Arderius, eran aprovechadas a la contra por Trojaola en primera oleada, o por Pizzo y Priolli en segunda. Las diferencias se hacían poco a poco insalvables para las donostiarras llegándose al descanso con un “excesivo” 15-19.
En la segunda mitad, Bera Bera salía con una defensa 5:1, intentando frenar las acometidas de la primera línea canaria y su conexión con Haridian Rodríguez. Parecía que hacía efecto el cambio, pero solo fue un espejismo, pues además de seguir perforando la defensa local con cierta facilidad, aparecía la figura de Silvia Navarro que desbarataba los ataques azules desquiciando a las jugadoras donostiarras que erraban una y otra vez ante la portera internacional.
Puche relevaba a Merche Castellanos y colocaba a Silvia Lladró —fichada para suplir a una convaleciente Maite Zugarrondo— y tampoco daba demasiados beneficios a la defensa. La diferencia se mantenía, incluso se hacía mayor, y Bera Bera optaba por una defensa 4:2 que dejaba demasiados espacios para un ataque canario que solventaba con facilidad los 1×1 que se presentaban. Rocasa conseguía su máxima diferencia con 22-30.
En vistas del desastre, solo le quedaba a Bera Bera intentar recortar la diferencia de goles por aquello del goal average, consiguiendo en los últimos minutos dejarla en 5 goles, 29-34.
Resumiendo, varapalo para las guipuzcoanas en un partido que, quizás, llega demasiado pronto para ambas escuadras, pero que deja a las claras que Rocasa ACE quiere estar en la pomada. Las de Antonio Moreno han demostrado hoy que las importantes bajas de María Luján y Almudena Rodríguez no han mermado su potencial, incluso la nuevas incorporaciones le han dado un plus de velocidad al ataque y que hoy han sabido aprovechar muy bien.
Super Amara Bera Bera deberá recapacitar ante este resultado. Una defensa floja, incluida las porteras, cuando era su gran bastión en pasadas temporadas, y un ataque donde han prevalecido las pérdidas de balón que han lastrado sobremanera a las de Montse Puche.
Imagen destacada: Rocasa ACE
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