Opinión

Carta al oviedismo: Claro que creemos

Este fin de semana volvemos a disputar el gran derbi de la región, y aunque sea lejos de nuestra casa, estoy seguro que esos 1.200 locos de azul inquebrantable harán que los nuestros se sientan como en casa.

Queridos oviedistas, tras una enorme travesía que nos ha llevado a lo largo de los campos asturianos y de otros nacionales, aunque no donde merecíamos estar, ha llegado la hora, nuestra hora. Este sábado, 9 de septiembre de 2017, es el día elegido para que todos esos locos que estamos hechos de una sangre azul inquebrantable podamos volver a disfrutar del mejor partido de nuestras vidas.

No hay que mentir, por supuesto que no, pero tampoco pasarse. No somos favoritos para llevarnos el partido, eso está claro. Nos triplican en dinero, acaban de descender de Primera y juegan en su casa. Pero da igual. Somos el Real Oviedo, un equipo que sabe sufrir, un equipo que pelea, que lucha y se deja la piel en el campo.

Porque nunca nos han puesto las cosas sencillas, no hace falta recordarlo. Ha habido que pelear, que sudar la gota gorda para salir de un infierno en el que estuvimos durante más de una década. Hemos sufrido derrotas muy dolorosas, pero estamos de vuelta. Porque este equipo nunca se rinda, nunca tira la toalla, y por eso estamos orgullosos de lo que somos, fuimos y seremos.

Ser del Real Oviedo es algo grandioso. Y para todos, tanto por un lado como por otro, poder volver a vivir semejante fiesta es algo increíble. También es verdad que, ni siquiera en el horario, lo han puesto fácil. Porque los asturianos debemos escoger. O derbi o Vuelta. Pero bueno, vamos a centrarnos en ese partido en El Molinón. Vamos a disfrutar de una fiesta futbolística en la que 1.200 seguidores azules van a llevar en volandas a los nuestros hacia los tres puntos.

El oviedismo sí cree

Porque hay motivos para creer. Que sí, que lo sé. Quizás no ha sido el mejor arranque de temporada, quizás no estamos teniendo suerte con las lesiones, pero da igual, confianza máxima en esta plantilla, en la que, a parte de los futbolistas del primer equipo, contamos con una serie de canteranos que se dejan la piel por esta camiseta cada vez que saltan al césped. Podemos creer porque tenemos a Saúl, para mí, sinceramente, uno de los futbolistas más completos de la categoría. Porque también está Toché, que llega después de arrancar los dos primeros goles, uno de ellos, por cierto, de esos que dicen “de galería”.

Pero, sobre todo, el motivo más grande que tenemos para creer es la afición. Una hinchada con orgullo, valor y garra que va a apoyar desde donde esté. Ya sea en el propio estadio, en la capital del Asturias, fuera de la región o, incluso, lejos del país. Porque así es la afición del Real Oviedo, mundial. Por todo esto y por ser quien somos, estoy seguro de que estamos y estaremos orgullosos de nuestro equipo. ¡Vamos Oviedo!

¡PUXA UVIÉU!

Imagen destacada: realoviedo.es

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