Empate en Son Malferit tras un partido que ha destacado más por la intensidad con la que han salido los jugadores, especialmente en el inicio de la segunda mitad, que por las ocasiones claras de peligro.
En los primeros minutos han predominado más los nervios y las imprecisiones. El Mallorca optaba por el juego directo buscando continuamente a sus dos atacantes, mientras que el Baleares ha creado algo de peligro mediante las jugadas de combinación, buscando el ataque por su banda derecha donde Xisco se asociaba bien con Kike.
El primer tiro a portería ha sido por parte del balearico Xisco en el minuto 16, mediante un disparo lejano y muy centrado, sin problemas para Reina. Tras esta jugada, ha subido un punto el nivel de tensión al hacerle una leve falta de Oliva sobre el portero y, tras otras faltas, el árbitro ha tenido que llamar la atención al preparador físico del Baleares.
La siguiente jugada peligrosa ha venido tras una gran jugada de Kike en banda derecha deshaciéndose fácilmente de Raíllo, llegando a línea de fondo y haciendo un pase de la muerte para que Xisco rematara directamente fuera desde dentro del área grande. Pocos minutos más tarde, de nuevo Kike era protagonista con un disparo que se ha marchado por encima del larguero por muy poco.
El Mallorca por su parte, no ha logrado llevar demasiado peligro y tan sólo se ha acercado a la portería contraria mediante saques de esquina y tiros muy desviados de Abdón y Pol Roigé. El primer tiro bermellón entre los tres palos ha sido en el minuto 37 por parte de Damià, también desde la frontal del área y sin problemas para Aulestia en lo que sería la última oportunidad peligrosa de la primera parte.
La segunda parte ha arrancado con dos córners lanzados con peligro por parte del conjunto local, pero muy pronto ha llegado la jugada polémica del encuentro: en un pase en largo sin aparente peligro, Reina ha atrapado la pelota y Gerard Oliva ha llegado muy tarde haciéndole falta. Reina se ha quedado en el suelo quejándose mientras el árbitro le sacaba tarjeta amarilla al delantero local. Se ha montado una pequeña trifulca mientras Oliva recriminaba a Reina su actitud, por lo que se ha ganado la segunda amarilla y la correspondiente expulsión, confirmada tras unos segundos de indecisión y consultas del árbitro con su asistente.
Acto seguido, con las revoluciones por todo lo alto, otra acción de nervios ha terminado con tarjeta amarilla para Lago y Ruiz, y con las insistentes protestas de De la Morena también ha sido expulsado. Tras esta acción, el Mallorca ha pasado a dominar el encuentro pero sin crear peligro hasta que un centro-chut de Bonilla ha estado a punto de sorprender a Aulestia.
La gran oportunidad para el Mallorca ha estado en las botas de Cedric quien en el minuto 76 ha logrado plantarse solo ante Aulestia tras un error de la zaga blanquiazul pero su disparo ha salido rozando el palo derecho. Desde esta ocasión, el Mallorca ha vuelto a crear peligro en otra jugada en el minuto 85 donde ni Abdón, ni Reyna ni Damià han sido capaces de poner en apuros a Aulestia.
Borja finalmente ha tenido la última oportunidad local con un disparo lejano sin problemas para el portero bermellón.
Tablas en el derbi de Palma que deja más satisfecho al Baleares con 4 puntos pero que pudo defender el resultado durante 40 minutos, mientras que el Mallorca sigue sin encajar un gol pero sigue demostrando sus dificultades para crear peligro en el área rival.
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