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La margarita de Fernando Alonso

Fernando Alonso parece deshojar la margarita en cuanto a su futuro en la Fórmula 1. El piloto español está entre, aparentemente, tres opciones: seguir en McLaren sin Honda, marcharse a Williams o una tercera y poco probable etapa en Renault.

Tras el ridículo de McLaren-Honda en Spa-Francorchamps y la muestra de pilotaje una vez más del asturiano, enfureció al piloto quedando claro su descontento con la marca nipona. “¡Vergonzoso!”, así rezaban las declaraciones de un Alonso al límite de su paciencia y que tuvo que retirar su monoplaza por una supuesta pérdida de potencia en el motor de su McLaren. Tras esto, Honda respondió al abandono de Alonso con un comunicado en el que decía que no había encontrado fallo alguno en el coche de Fernando, dejando en evidencia al piloto. Alonso, harto ya, tiene decidido continuar en McLaren siempre y cuando sigan sin Honda.

El problema es el contrato que tienen firmado, dado que les llevaría a los tribunales con más que posibles compensaciones económicas por parte de los de Woking y cuando no encuentran una gran solvencia económica. Por ello, en McLaren se sienten como Fernando pero aun no han apoyado este hecho públicamente, y por si hubiese una posible marcha de Alonso, Zak Brown ya publicita a su posible sustituto, el joven Lando Norris. De este modo, el asturiano no ve nada claro otra temporada más viendo com0 los Force India, Renault o Haas les pasa como cohetes en una recta. A McLaren. A él.

Por ello, Alonso está abierto a todo tipo de ofertas, pero ya hay equipos con los asientos cerrados. Ferrari ha confirmado a Sebastian Vettel y Kimi Räikkönen, Mercedes tiene a Lewis Hamilton y falta hacerse oficial la renovación de Valtteri Bottas que es solo cuestión de días y en Red Bull parece que no se moverán ni Daniel Ricciardo ni el descontento Max Verstappen. Este panorama cierra de un portazo cualquier opción de Fernando a un equipo por el que luchar por el campeonato y sus principales opciones son Williams y Renault.

Los ingleses buscan resarcirse de una muy mala temporada y comenzar un nuevo proyecto junto a Paddy Lowe y un gran piloto, Fernando Alonso. El director deportivo busca un hombre que ayude al equipo y lo empuje hacia arriba. El principal problema es que Mercedes es su suministrador de motores, pero eso sí, capados. Por lo que no podrían estar a la misma altura. Economicamente la operación parece factible. Alonso es amigo del padre del Stroll, multimillonario canadiense que es amante de la F1 y quien ha introducido a su hijo en el Gran Circo con 80 millones de euros por delante. De este modo, Lawrence Stroll pagaría el sueldo del español y situaría a su hijo para que aprendiese junto a un bicampeón del mundo. Mientras, en Williams ni confirman ni desmienten.

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Fernando Alonso charlando junto a Lawrence Stroll / Foto vía: motorsport.com

Por último se sitúa Renault, la casa del piloto asturiano, pero donde es poco probable otra tercera etapa. No tienen un coche ganador, pero sí es cierto que han dado un gran salto de calidad respecto a la temporada pasada y parece un proyecto ambicioso. Aun así, en la escudería del rombo tantean también a Sergio Pérez -acaba contrato con Force India-, a Esteban Ocon -quien fue piloto probador de la marca francesa- y Carlos Sainz -la gran aspiración de Renault en estos dos años-.

De este modo, el futuro de Fernando Alonso parece incierto y con pocas probabilidades de volver a ganar en 2018, pero lo que sí parece claro que cada vez parecen más distanciados McLaren-Honda y Alonso.

Imagen destacada vía: marca.com

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