Los jugadores de Luis Carrión volvieron a tener una nueva prueba, esta vez en el Estadio San Pablo, ante el recién ascendido a Segunda División B Écija Balompié, futuro rival del filial. Una victoria con poco juego vistoso pero con eficacia en los últimos metros, además de algún que otro susto con Fernández en la segunda mitad.
El encuentro tendría un comienzo que marcaría la tendencia de todo el partido. El Córdoba CF salía a dominar el balón y apoyarse en los jugadores del mediocentro basculando el esférico con las bandas y así tratar de encontrar los huecos que iba a ir dejando poco a poco el Écija. Pero lo que fueron buenas intenciones de primeras, al final se vició en un juego de balones por las bandas y más de un correcalles entre ambos conjuntos.
Con la iniciativa del conjunto blanquiverde, una vez más vestido con la segunda equipación rosa, llegaría el primer gol. Tras una recuperación de Alfaro, recibía el balón Javi Galán quien no dudaría y tras encarar la portería metería un buen gol con un tiro cruzado potente.
Poco a poco iban despertando los jugadores del Écija, animados por los suyos desde la grada, y fueron cogiendo cada vez más importancia con el esférico. La cercanía del balón al área de Marc Vito e incluso alguna parada de éste ante las llegadas astigitanas no presagiaban lo que iba a suceder diez minutos después del primer gol. En un balón suelto cerca del área azulina, Markovic cogía el balón y, tras alzar la cabeza y ver a Fermín algo adelantado, el serbio no dudaría dejando un golazo de vaselina que pondría el 0-2 en el marcador.
La primera parte no tendría mucho más sobre el terreno de juego, salvo por alguna ocasión peligrosa por las bandas del Écija y el apagón que se sufriría a falta de cinco minutos, jugando estos últimos solo con la luz natural que permitía ver aún lo suficiente para irse a los vestuarios con una tranquila ventaja.
Segunda parte de empate a goles y de cambios
Con los problemas de la luz medio solventados y con bastantes cambios sobre el césped, el Córdoba saltaría al terreno de juego para intentar terminar de rematar a su rival, pero nada más lejos de la realidad. Los cambios en ambos conjuntos pusieron un juego tal vez más equilibrado y el Écija empezaría a llegar más al área blanquiverde.
A pesar de la supremacía del conjunto local sobre el terreno de juego, la entrada de Jona y Guardiola a la vez hizo que los cordobesistas tuvieran algo más de empuje a la hora de llegar al área rival. Poco a poco se irían acercando con más fuerza pero el gol no llegaría de jugada, sino de penalti, tras una mano dentro del área. El responsable de ejecutarlo sería Jona, quien con su gol se convertiría en el máximo goleador hasta el momento del Córdoba esta pretemporada, sumando dos tantos en su haber.
Pero los jugadores de Juan Carlos Gómez no habían dicho su última palabra aún. Se acercaban los minutos finales y los azulinos sabían que no se podían ir sin un gol como mínimo para su afición, por lo que seguirían volcándose sobre la portería de Alberto, llegando a encontrar por fin el tanto deseado. Después de una buena jugada de Moyita, Abraham metería un buen gol que dejaría finalmente el marcador en 1-3 y un buen sabor de boca para los suyos que veían como su equipo luchó hasta el final.
De esta manera, la pretemporada continúa y ambos conjuntos tendrán que seguir viendo cuáles fueron sus errores durante este encuentro para solucionarlos y cuáles fueron sus puntos fuertes para seguir potenciándolos, haciendo de ellos un arma para los próximos encuentros.
Imagen destacada: José Luis Pedraza (Sexto Anillo)
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