Análisis

La explosión de la D-League

Hace unos días, vimos la exhibición de Juancho Hernángomez contra el equipo más en forma de la NBA, los GSW. También hemos podido comprobar cómo Whiteside ejerce como uno de los líderes de Miami. ¿Qué tienen en común ambos jugadores? Que en su llegada a la NBA no todo les fue tan bien como les va ahora. Para ambos no fue un camino de rosas llegar a obtener minutos en el caso del primero, ni de ser estrella en el caso del segundo. Ambos se vieron en muchos partidos apartados, con pocos minutos en la rotación… Sus entrenadores no dudan de su calidad ahora, ni dudaron entonces. Para remediar su situación, los entrenadores diseñaron un plan para aclimatarlos a las características NBA, y para ello los mandaron a la Liga de Desarrollo de la NBA. Algunos dijeron que los mandaban al equipo B, que era un paso atrás en su carrera, que no entrarían a la rotación nunca más en la plantilla… pero no se dieron cuenta que cuando estás en la NBA, lo que no quieres es dejar escapar el sueño de poder jugar. Y si el entrenador te manda a esta liga para que te aclimates, no vas a decir que no.

¿Pero, entonces es dar un paso atrás? ¿Es el paso previo antes de volver a Europa o a otras ligas? Pues ni lo uno ni lo otro. Es un peaje que hay que pasar antes de triunfar en la NBA, y cada vez se hace más común que los entrenadores manden a los jugadores que no gozan con la confianza de éste a sus equipos franquiciados en la D-League para que ganen confianza y se rueden. ¿Por qué digo que no es un paso atrás? Porque si usamos el argumento de dar un paso atrás, de bajar al equipo B, tendremos que decir entonces, que si bien el jugador dio un paso hacia atrás, al acabar su periodo en esta liga, habrá dado tres o cuatro hacia adelante. Por lo que el balance siempre acaba siendo positivo.

¿Cómo funciona?

Tratemos de explicar cómo funciona esta liga. Creada en 2001 con el propósito de ser una liga donde la NBA pudiese probar ciertas innovaciones, con jugadores jóvenes que aspirasen a dar el salto a la gran liga pudiesen competir en un ambiente parecido a la NBA donde se hiciese un especial hincapié en mejorar las cualidades del jugador. También donde entrenadores se ganasen su experiencia en los banquilos para luego poder dar el gran salto a la NBA, al igual que con los árbitros, a los cuales les ayuda a adquirir experiencia antes de subir a la gran liga. Actualmente hay 22 equipos, todos ellos con una relación o vinculados a un equipo NBA. La relación puede ser directa con un control total sobre el equipo (one-to-one) o híbrida, donde la franquicia NBA solo controla la gestión baloncestística del equipo.

¿Y la organización?

La liga está dividida en dos conferencias y cuatro divisiones: Este (División Atlántica y Central) y Oeste (División Sudoeste y Pacífico). Tras 50 partidos de RS, los 4 campeones de las divisiones, más los dos mejores equipos de cada conferencia (sin contar a los campeones directamente ya clasificados) jugarán los Playoffs. Se enfrentaran en un formato de cuartos, semifinales y final, al mejor de tres partidos. Además esta liga cuenta con dos citas importantes en el calendario, su All Star particular, y dos partidos ante los dueños de las franquicias NBA, que suele coincidir con las fechas en los que los equipos NBA pueden firmar a jugadores con contratos de 10 días (por ejemplo, los GSW firmaron por 10 días a Briante Weber, jugador de los Sioux Falls Skyforce de la D-League).

Ganó el equipo del Este (105-100). Fuente: NBA

Para entrar a jugar en esta liga, hay tres posibilidades. La primera de ellas es a través del draft, entrando en este sistema de elección jugadores cortados tras los training camps de la NBA, jugadores internacionales y jugadores no drafteados por la NBA. El segundo modo es con los assignments de las franquicias NBA. Éstas pueden mandar a jugadores con menos de tres años de experiencia en la gran liga un número ilimitado de veces a un equipo de la D-League para que se fogueen, gocen de los minutos que no tendría en la NBA, evolucionen en su juego y ganen confianza para cuando sea llamado de vuelta. Este es el caso de muchos jugadores de la NBA, como los ya mencionados Juancho Hernángomez (Nuggets), Whiteside (Miami), u otros como Gerald Green (Boston), Schröder (Atlanta), Rudy Gobert (Utah), Danny Green (Spurs), C.J. McCollum (Portland), Eric Bledsoe (Suns)… La tercera vía es la del try-out, vía que organiza cada franquicia a nivel local con la supervisión general de la D-League, en donde cada participante deberá pagar 350$ para poder presentarse. Jugadores como Simmons (Spurs), el cual en el Rising Stars se marcó un partidazo con 27 puntos, y otros, que llegaron por esta vía aunque no suele ser la principal.

¿Y cómo se sale de esta liga de desarrollo?

Pues o bien a través de lo que se ha denominado como un call-up, que es la principal vía para los jugadores de esta liga de recalar en un equipo NBA a través de los contratos de 10 días. La NBA solo permite a las franquicias firmar dos contratos de 10 días, teniendo que decidir si lo corta o mantiene para el resto de la temporada. Un ejemplo muy reciente es el mencionado anteriormente de los GSW con Weber. En esta temporada se han firmado hasta un total de 19 contratos de 10 días. La otra vía es que un equipo internacional pague la cláusula del jugador que puede ser de 45.000$ o de 50.000$ en función del contrato del jugador en cuestión.

La inversión en esta Liga es apabullante. Gatorade ya ha firmado un contrato de patrocinio con la NBA para ser su sponsor principal, y cada vez más equipos de la NBA se fijan en esta liga, a través de ojeadores, mejora de infraestructuras, publicidad… Desde la primera edición, en donde había 8 equipos, hasta la actualidad donde ya hay inscritos 22 equipos. Y esto no para de crecer, ya que para la temporada que viene, 3 nuevos equipos se inscriben (Bucks, Hawks y Memphis). Minnesota por su parte tratará de comprar el equipo que actualmente está vinculado con Memphis, relación híbrida entre franquicia (Grizzlies) y dueño del equipo de la D-league que finaliza esta temporada (por lo que no sería un nuevo equipo en la liga, sino un cambio de dueño).

Logo D-League a partir de la temporada 2017-2018. Fuente: USA Today

Solo 5 equipos de la NBA no tienen ninguna vinculación con algun equipo de esta liga, ni parece pretender tenerlo en un plazo medianamente corto. Estos equipos son los Wizards, Portland, Clippers, Pelicans y Nuggets.


Será raro si a medio largo plazo estos equipos no se plantean la creación de un equipo y tener una vainculación directa con la D-League. De igual manera, la explosión mediática y en importancia en el baloncesto profesional es innegable, y el interés de patrocinadores y grandes fraquicias de la NBA se ha hecho patente. Esta liga no ha alcanzado su techo, le queda mucho camino por recorrer, pero será positivo si se mantiene como lo que es, un banco de pruebas y de rodaje de la NBA tanto para entrenadores, árbitros y en especial jugadores, y a su vez, ofrece un ritmo altamente competitivo y de gran interés.

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