El MVP de la jornada 22 en LEB Oro es un recién llegado a la categoría y, en sólo dos meses, aparte de esta valoración personal, ha conseguido con el Unión Financiera Baloncesto, el primer título nacional para el baloncesto asturiano, la Copa Princesa.
En el mes de diciembre del año pasado el jugador del Oviedo Baloncesto, Drew Windler, dejaba el equipo sin previo aviso, ello aparentemente sería un hándicap para un conjunto en racha deportiva ascendente, pero la increíble adaptación de su sustituto ha sorprendido a propios y a extraños. Una vez más, el director deportivo de la capital del Principado, ha dado con la tecla adecuada fichando a un jugador de equipo versátil y determinante en momentos claves de los partidos. Es destacable el hecho de que un jugador de menos de dos metros y con un físico estándar, que viene de jugar de escolta, esté acoplándose al puesto de cuatro, cumpliendo en el mismo y poniendo en apuros a sus pares en el intento de defender su tiro exterior.
Paul Jesperson fue una estrella en su pequeña población natal, Merrill, en el estado de Wisconsin, destacando como el máximo anotador de todos los tiempos de la sección de basket de los “Blue Jays”, anotando 1.696 puntos para su High School y siendo nombrado jugador del año en su temporada senior en la que promedió 22,5 puntos, 7,4 rebotes 2,7 asistencias y 1,8 robos por partido.
No tuvo suerte en su primera experiencia universitaria en la Universidad de Virginia, donde apenas jugaba, y sus números se resintieron sensiblemente. Fruto de ello decidió trasladarse a la Universidad del Norte de Iowa, encajando perfectamente en el juego de los panthers y convirtiéndose en un jugador de equipo con un rol de tirador letal en los momentos más calientes de los partidos, como se puede apreciar en este vídeo viral (https://youtu.be/SdFB3OGUaGU), con más de millón y medio de visualizaciones, ganando un partido en el March Madness NCAA ante la superior Universidad de Texas. En su época de educación secundaria ya había realizado tiros ganadores (buzzer-beater) que llevaron a su instituto a disputar la final estatal contra todo pronóstico.
Al no ser drafteado en la NBA, probó a jugar en la D-League, en los Vipers de Rio Grande Valley, pero fue cortado a las primeras de cambio, este hecho y la “espantada” de Drew Windler, han hecho que podamos disfrutar en la LEB Oro de este frío anotador proveniente del estado del Tejón.
Reseñable también su integración a la ciudad en tan poco tiempo y lo acoplado que está en este equipo tan familiar. El origen sueco de su apellido y su fisonomía hace que haga una dupla fantástica con el jugador Loftberg, sueco de origen y tirador de profesión.
Y como de casta le viene al galgo, comentar que el pequeño de los Jesperson sigue la estela de su hermano y tras destacar en Merrill, juega actualmente en la NCAA, para la prestigiosa Universidad de Green Bay, por lo que en el futuro no sería de extrañar verlo jugar en ligas LEB.
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Foto destacada vía: solobasket.com
