El equipo dirigido por Tyronn Lue con la importante baja de Jr. Smith repite la hazaña de las finales y derrota nuevamente a los Golden State Warriors por 108-109 en un partido que no hace más que incrementar la rivalidad entre ambos conjuntos.
Estos dos equipos llevaban sin verse las caras desde las pasadas finales que ganaron los Cleveland Cavaliers. Esta es una de las causas principales por las cuales estaba anoche lleno a reventar el Quicken Loans Arena. A esto le debemos sumar el morbo generado por el fichaje de Kevin Durant por los Warriors.
Todo el mundo esperaba un encuentro disputado y lleno de polémicas. A los pocos minutos del primer cuarto se daba la primera: Draymond Green llevaba ya cometidas dos faltas, una de ellas derivaba en una técnica debido a las protestas. Pese a esto, unos Warriors erráticos en el tiro exterior llegaban con ventaja al descanso (55-52) liderados por un fantástico Durant.
Al principio del tercer cuarto, Klay Thompson encarrilaba el partido desde la línea de tres. Así, los Warriors llegaron a disfrutar de una ventaja de 14 puntos. Sin embargo The King demostró una vez más que no se rinde nunca, tomó las riendas del partido y devolvió a los Cavs la oportunidad de llevarse el encuentro.
Comenzaba último cuarto con un marcador de 87-80 favorable a los Warriors. Y aquí es donde más se notó el trabajo de personajes a priori secundarios: Tristan Thompson dominaba el rebote ofensivo generando muchas segundas opciones mientras que Richard Jefferson nos dejaba – a sus 36 años – dos matazos impresionantes. Sin embargo, el factor decisivo fue la aparición de Kyrie Irving. El base de Cleveland estuvo imparable anotando 14 puntos en este cuarto. Entre ellos el game winner que ponía a los Cavs un punto arriba a falta de 3.4 segundos. Sin duda, Irving volvía a convertirse en verdugo, al igual que hiciera en las finales. En esta última posesión que tendría Warriors es donde más polémica hubo, debido a una posible falta de Jefferson sobre Durant que no se pitó. En palabras del propio Durant en rueda de prensa: “caí, pero no por mi culpa”.
A todo esto nos encontramos con un Kevin Love que pesé a disputar pocos minutos – debido a problemas de faltas – se marchó con 20 puntos. Stephen Curry por su parte estuvo desaparecido, tan sólo 15 puntos y muy malos porcentajes.
Sin duda alguna son actualmente dos de los mejores equipos de la liga. Llevan ya dos finales consecutivas viéndose las caras y quieren repetir una tercera, algo sin precedentes en la historia. Posiblemente estemos hablando de la rivalidad de la década.
Ficha Técnica: http://es.global.nba.com/boxscore/#!/0021600457
Vídeo Resumen: https://youtu.be/pLqQb1i58oE
Resultados de la jornada:
BOS 119-114 NYK
GSW 108-109 CLE
CHI 100-119 SAS
MIN 100-112 OKC
LAC 102-111 LAL
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