Klopp salía con Karius en portería, cada vez más asentado en Merseyside. Clyne, Matip, Leiva y Milner en defensa. Lallana, Can y Henderson mediocampo; arriba Firmino, Coutinho y Sadio Mané. Pese a que las alineaciones proporcionadas antes del partido ponían a Can como central, después se vió que era Leiva el que ocupó dicha posición.
El Liverpool arrancó con un ritmo altísimo, teniendo el balón para atacar siempre y creando ocasiones desde el inicio. En la salida de balón, Matip y Leiva se abrían mientras que Henderson se metía atrás. Los laterales subían hasta el mediocampo y luego Lallana recibía y jugaba con Firmino, Coutinho o Mané, que recibían en 3/4 y formaban el ataque.
No había un 9 claro pero siempre había alguien en esa zona, ya fuera Firmino, Mané, Coutinho y en ocasiones Can que llegaban desde de 2ª línea. Mucha movilidad en 3/4 de campo y siempre intercambiando posiciones. Henderson o Can solían descolgarse para llegar desde 2ª línea al remate.
Los Reds tuvieron el control del partido los primeros 45 minutos, imprimieron mucho ritmo, control y precisión. Recuperación tras pérdida, presionando a poseedor y posibles pases. Repliegue intenso en 4-3-3, cerrando espacios en el medio y creando un 2×1 en banda.
Con todo esto el Liverpool llegó con 3-0 al descanso. El primero fue de Mané después de un córner sacado en corto que puso Coutinho, se anticipaba Mané que peinaba y hacía el 1-0.
El segundo llegó en una jugada construida entre Lallana, Mané, Firmino, recibía Coutinho que marcaba por bajo a Gomes.
El 3-0 llegó en un balón largo de Karius que peinó Henderson, se la llevó Lallana que puso un balón al segundo palo y Can finalizaba en gol. Los tres goles no fueron fruto de la casualidad, sino del trabajo diario.
Así se llegaba al descanso. Habiendo hecho 15 tiros entre ellos 9 fueron a puerta. Teniendo 60-40 en posesión y el liderato prácticamente en la mano.
La segunda parte arrancó con un Liverpool que siguió controlando el partido, sin un ritmo tan alto, pero si dominando.
El cuarto llegó en una jugada en la que Lallana ganaba la línea de fondo, la ponía atrás y Firmino la empujaba a placer en la línea.
El 5-0 lo hizo Mané gracias a un pase atrás de Firmino. Tras una buena jugada Red. El ritmo bajaba y el Liverpool se relajaba, por esto el Watford pudo atacar y marcar Janmat. 5-1
Y ya para acabar Wijnaldum cazaba un rebota en el área y hacia el sexto. El partido acababa con un Liverpool que desde el principio fue a por el partido y el resultado así lo demuestra.
Imagen vía: independent.co.uk
Imagen texto vía: ShareMyTactics.com
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