El Masters 1000 de París ha decidido ya quiénes serán los semifinalistas de su torneo. La sorpresa ha saltado cuando menos se esperaba regalando a Andy Murray tras la eliminación de Djokovic ante Cilic. Isner y Raonic también ganaron sus partidos.
La jornada del pasado viernes ha sido de lo más excitante. El jugo del tenis se vio exprimido al máximo por parte de unos profesionales que bordaron su rol en la pista para colarse en las semifinales del último Masters del año.
En primer lugar, la noticia, sin duda alguna, del entorchado, ha sido la salida por la puerta de atrás de un ‘Nole‘ que no pudo coger la medida al croata Marin Cilic. En una hora y cuarenta y cinco minutos el número diez del Ranking ATP se llevó el gato al agua por 6-4 7-6(2), creando la mayor de las alucinaciones a una grada que era incapaz de creer lo que había ocurrido. Y es que, Novak se mostró con fuerza, pero no con la suficiente, ya que sus errores lo llevaron a perder hasta 15 de los 28 puntos jugados con un 49% de segundos saques que queda lejos de sus mejores registros.
Así pues, Marin deberá verse las caras con el estadounidense John Isner. El gigante de Greensboro (Carolina del Norte) se apuntó unas valiosas semifinales al superar a su compatriota Jack Sock por 7-6(6) 4-6 6-4 con un total de 17 servicios directos y un set en contra en el que, a causa de desconectar un solo juego, terminó por ceder. Aun así, el dominio, claro por su parte, le otorgó la victoria de forma fulgurante.
Por otro lado, el otro duelo por un puesto en la final enfrentará a Raonic y a Murray, dado que ambos hicieron los deberes en sus respectivos encuentros. Milos terminó con el local Jo-Wilfried Tsonga en una hora y media por 6-2 7-6(4) sin ceder quiebra alguna en todo el transcurso del envite. Junto a ello, llegó a mostrar una regularidad exquisita que lo condujo directamente hacia el control del peloteo casi en todas las ocasiones, privando así a ‘Ali‘ Tsonga de tomar el timón con sus portentosos y potentes golpes.
Finalmente, el escocés que busca hacerse con la corona del número uno, Andy, venció al checo Tomas Berdych por 7-6(9) 7-5 en un complicado choque de trenes en el que ambos tuvieron que dar el todo por el todo para alzarse. Tan solo durante la segunda manga pudieron caer los breaks necesarios para un desequilibrio que escaseó en el primer parcial. Tomas, con unos nervios que le jugaron una mala pasada, se dejó hasta 8 puntos con dobles faltas (4 en cada set), propiciando así, y junto a varios alicientes más, la pérdida del partido.
Tal que así, pues, ha concluido la fase más importante de la competición parisina que finalizará el próximo domingo. Ahora tan solo queda esperar a saber si el primer puesto del ranking cambiará o se mantendrá como lo ha hecho durante los últimos años.
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