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Los elegidos avanzan sin rival en París

Los principales cabezas de serie del tenis mundial, a excepción del japonés Kei Nishikori, han avanzado con éxito hacia la cuarta ronda del torneo parisino que cierra el año tenístico en cuanto a Masters 1000 se refiere.

La jornada del jueves de este entorchado francés ha sido de lo más cotidiana. Tan solo uno de los encuentros ha sobresaltado al público de la pista central del BNP Paribas Masters Paris, el choque entre un Jo-Wilfried Tsonga y un Nishikori que ha tenido absolutamente de todo. El francés, gracias al empuje de su público, ha conseguido derrotar a un asiático que lo puso contra las cuerdas al apuntarse el primer parcial por 0-6. El galo supo reaccionar y llevarse las dos mangas siguientes con una suma total de 18 servicios directos que le regalaron el 6-3 7-6(3) de la victoria.

Junto a este enfrentamiento se llevaron acabo otros de gran interés. Por ejemplo, el serbio número uno del mundo, Novak Djokovic, venció al búlgaro Grigor Dimitrov sufriendo la ira de este chico de 25 años que busca cada vez más acercarse al Top 10. Hasta dos horas y media tuvo que pasar en pista el rey de la ATP para derrotar a su contrincante por 4-6 6-2 6-3, apuntándose la elevada cifra de cinco dobles faltas totales y jugando con un porcentaje menor al 65% de primeros. A la par de él, su máximo rival del momento, Andy Murray, barrió de la pista a Lucas Pouille en hora y cuarto con un dominante 6-3 6-0 en el que tuvo que remontar incluso una rotura durante el primer parcial.

El resto de choques se definieron con victorias de grandes nombres como John Isner, verdugo el pasado miércoles de David Ferrer, que consiguió derrotar al alemán Jan-Lennard Struff por 6-4 (4)6-7 6-3 con la friolera de 27 aces por 16 de su adversario. Otro de los americanos, el chico de Lincoln, Jack Sock, pudo llevarse el gato al agua ante el francés Richard Gasquet con un resultado impactante de 6-2 3-6 7-5.

También el croata Marin Cilic hizo los deberes acabando con los sueños de un David Goffin al que no se le vio demasiado acertado. El belga perdió moral durante la primer manga, y, pese a luchar por la muerte súbita de la segunda, terminó cayendo por 6-3 7-6(9).

Finalmente, el canadiense Milos Raonic hizo trizas al uruguayo Pablo Cuevas remontando un set, por 4-6 6-1 6-2, una victoria que lo conduce directamente hacia el duelo ante Tsonga en la próxima jornada. Y es que, el planteamiento de cara al viernes es de lo más jugoso. Isner se verá las caras con Sock en el duelo estadounidense; ‘Nole’ deberá superar la piedra en el camino que colocará con sus servicios bomba Cilic; y Murray se situará ante la mágica raqueta del checo Tomas Berdych, encargado de mandar de vuelta a casa a Gilles Simon por un resultado de 6-3 6-4.

Tal que así ha concluido una tercera ronda que ha dejado consigo las buenas noticias del avance de las estrellas y la soledad de no ostentar en ella español alguno. Sin embargo, aun así, no cabe duda de que el tenis exhibido en las instalaciones parisinas ha sido de un nivel, no digno, sino aún mayor.

Imagen: ATP World Tour.

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