Ya son tres años desde que murió María de Villota, una de las pocas mujeres que se encontraban en activo en el mundo de la Fórmula 1 y por eso vamos a analizar su trayectoria.
María empezó en el mundo del karting a los 16 años, gracias a su padre, Emilio de Villota, quien pudo acompañarle en sus primeros pasos. Más adelante, participó en el campeonato de España de Fórmula 3, donde no consiguió grandes resultados, Ferrari Challenge, Maserati Trofeo y en el ADAC, donde sí consiguió una meritoria tercera posición. Al año siguiente (2007), María fue la encargada de representar al Atlético de Madrid en la Superleague Fórmula hasta el 2011. A finales de ese mismo año, firmó con Renault F1 Team para representarles en algunos eventos. No obstante, en el inicio del año 2012 firmó por la escudería Marussia como probadora. En el Gran Premio de Valencia estuvo a punto de participar a Timo Glock por enfermedad, pero no pudo finalmente ya que no tenía la superlicencia necesaria para competir en la Fórmula 1.
Pocos días después, concretamente el 3 de julio de 2012, María se encontraba en el aeródromo deDuxford, Inglaterra, donde sufrió un fortísimo accidente mientras realizaba unas pruebas de aerodinámica para el equipo Marussia. El accidente fue de tal gravedad que se temió seriamente por su vida, pero gracias a una rápida intervención de los médicos, su estado mejoró ligeramente. En cuanto al impacto, se dice que chocó contra un tráiler cuya rampa estaba colocada a media altura, dando lugar a que el accidente fuera de mayor gravedad. Por consiguiente, María perdió su ojo derecho al día siguiente del accidente y le sería imposible participar en cualquier prueba de automovilismo en los años restantes de su carrera deportiva.
El 10 de octubre de 2012, realizó una entrevista para la revista «¡Hola!», donde explicó cómo fue su accidente al igual que el día 11 de octubre, donde realizó una rueda de prensa para agradecer todo el apoyo recibido durante los últimos meses.
Justo un año después, María de Villota nos dejó. Su cuerpo apareció sin vida en un hotel de Sevilla. Según la autopsia, murió por causas relacionadas con el accidente que sufrió en 2012, el cual le provocó graves secuelas.
Finalmente, María de Villota será recordada como una de las pocas mujeres que luchó para que el mundo de la Fórmula 1 estuviese formado tanto como de hombres como de mujeres. Nunca se rindió a la hora de conseguir ese ansiado puesto como piloto oficial que tanto deseaba. Sin embargo, lo que siempre recordaremos al pensar en ella, es que no perdía esa eterna sonrisa que tanto le caracterizaba.
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Foto vía: www.elmundo.es