El belga Van Avermaet se lleva la medalla de oro en el sprint final en la prueba de ciclismo en ruta en un recorrido de 250 kilómetros de subidas y descensos que no ha dejado indiferente a nadie.
Con seis escapados desde muy pronto, Pantano (Colombia), Kwiatkowski (Polonia), Albasini (Suiza), Geshcke (Alemania), Bystrom (Noruega) y Kochetkov (Rusia) con un ritmo muy alto, aunque el equipo español, que se encontraba al completo en el pelotón, supo mantenerlos a raya con un soberbio Jonathan Castroviejo, que impuso un ritmo altísimo, tanto que poco a poco fue dejando atrás a grandes favoritos a los metales.
A 77 kilómetros para el final, y con la etapa llegando a su momento clave, el equipo italiano cogió el mando del pelotón en la ascensión al durísimo puerto de la Vista Chinesa, un puerto de tan solo 9 kilómetros pero con ascensiones del hasta 6%. El equipo español nunca se quitó de las posiciones delanteras, y el grupo de escapados se mantenía al minuto de distancia.
Con los italianos delante, aprovechó Damiano Caruso para atacar, a su rueda se fueron Kwiatkowski y Kochetkov creando un segundo grupo de escapados, a 17 segundos del pelotón y a 50 de la cabeza de carrera. España volvió a tirar del pelotón aumentando de nuevo el ritmo del gran grupo.
Tras la subida, el recorrido tiene un descenso peligroso de siete kilómetros y una serie de llanos hasta afrontar de nuevo la subida. A falta de 50km las diferencias se redujeron, con la cabeza de carrera a 20 segundos del grupo perseguidor y a 30 del pelotón.
A falta de 40km el pelotón se rompe con Valverde, Joaquim Rodríguez, Froome y Níbali entre otros, con la cabeza de carrera a algo más de medio minuto. Diez kilómetros después llegó el ataque de los españoles Valverde y Purito, que terminó de romper al gran grupo. Lo siguieron Rui Costa e Impey. En el descenso, Porte sufrió una caída, víctima de la dureza de la bajada a la playa de Rio de Janeiro.
Por delante de los españoles corrían el trio de italianos, Níbali, Aru y Carusso que tenían un minuto sobre el pelotón. Valverde y Purito los persiguen. Los italianos tiran de un grupo formado por Aru, Caruso y Nibali (Italia); Fuglsang (Dinamarca); Henao (Colombia); Majka (Polonia); Thomas y Yates (Reino Unido); Van Avermaet (Bélgica) y Zeits (Azerbaiyán).
De nuevo en la subida, Purito llega a la estela de los escapados. El británico Froome atacó para despegarse del pelotón y acercarse al grupo de cabeza. Níbali intentó ponerse en cabeza y de nuevo atacó, aunque Henao, Yates y Majka, lo pesiguen entre otros. El corredor catalán se acercaba a ellos junto con Meintjes.
Solo quedaban 17 kilómetros cuando el italiano se marcha solo, aunque no muy despegado de un grupo de escapados, a 25 segundos de los perseguidores donde se encontraba Joaquím Rodríguez.
Con 14km hasta la meta comienza el descenso con el grupo de tres en cabeza formado por Majka, Henao y Nibali, a unos 20 segundos y bajando sobre el grupo perseguidor de Purito.
En el descenso Níbali y Henao sufren una caida y dicen adiós a sus opciones de medalla, Rafal Majka por suerte pudo esquivar a los caidos y se fue solo. El italiano y el colombiano se quedaron sentados en el arcen de la carretera pensando en la oportunidad perdida por culpa de la mala suerte o la poca precaución.
A solo 9 kilómetros, el polaco Majka llega a la zona llana con la mirada en los perseguidores que han visto como se volvía a rifar las medallas tras la caida y con el corazón en el oro. Purito, junto con Fugslang, Aru, Zeits, Meintjes, entre otros tiran a la caza del polaco. Aunque no se ponen de acuerdo para perseguir a Majka, que se escapa a 23 segundos. Purito esperaba rezagado a su oportunidad en el sprint. Ya quedaban 7km para la meta, y ante la desidia del grupo por perseguir, dos corredores saltan en solitario, Van Avermaet y Fuglsang bajan las diferencia con Majka a 9 segundos, que empezaba a sufrir el cansancio de la soledad. Las medallas parecían rifadas entre tres.
En el último kilómetro, los dos perseguidores cazan al polaco, que intenta mantenerse a su rueda pese a la fatiga. El sprint era cosa de tres, aunque en los últimos 500 metros Majka entrega la cuchara y se conforma con el bronca. Van Avermaet gana el sprint y le da un oro a Bélgica. La plata para el danés Fuglsang. Al final Joaquím Rodríguez llega quinto, que se lleva el diploma olímpico en su despedida del ciclismo profesional.
Foto via (RTVE.es)
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