La noticia que muchos aficionados al futbol mexicano esperaban finalmente se confirmó, pues el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) abrió la puerta para el regreso del ascenso y descenso en el balompié nacional.
Sin embargo, detrás de la resolución se esconde un obstáculo mayúsculo que podría frenar los sueños de varios equipos de la Liga de Expansión, pues será un ascenso condicionado, ya que los elencos tendrán que pasar la prueba de la solvencia económica.
De acuerdo con el periodista Luis Castillo, en su columna publicada en Récord, la Federación Mexicana de Futbol (FMF) y la Liga MX definieron un requisito clave, los clubes que aspiren a la Primera División deberán demostrar una solidez financiera inedita en el futbol mexicano.
El nuevo esquema establece un capital contable mínimo de 30 millones de dólares, cifra muy por encima de la realidad de la mayoría de equipos de Expansión, que apenas rondan activos de 5 millones, haciendo un engaño en el posible ascenso, y más sabiendo que en los últimos 5 años se ha bloqueado el crecimiento de la liga.
A esto se suma la obligación de presentar un crédito revolvente de al menos 15 millones de dólares ante una institución bancaria, un aval inmediato para responder a cualquier contingencia financiera.
En pocas palabras, el regreso del ascenso no dependerá únicamente del desempeño en la cancha. Ahora, será indispensable contar con músculo económico para competir al mismo nivel que los clubes consolidados de la Liga MX.
De la cancha a los despachos: un cambio de reglas
Hasta antes de la suspensión del ascenso en 2020, las exigencias estaban más enfocadas en la infraestructura y el desarrollo deportivo. Hoy, el modelo se redefine con un énfasis en la salud financiera, pues pretenden el crecimiento de los clubes gasta en un 600% en menos de dos años, poniendo imposible el panorama.
Aunque algunos celebran que se hayan eliminado trabas burocráticas innecesarias, críticos advierten que el nuevo filtro económico es casi infranqueable para clubes con presupuestos modestos, es decir, la mayoría de la categoría.
Requisito | Antes de 2020 | Ahora (propuesta) |
---|---|---|
Capital contable | No especificado | 30 MDD |
Crédito revolvente | No aplicaba | 15 MDD |
Infraestructura | Estadio mínimo de 15 mil lugares | Se mantiene |
Fuerzas básicas | Obligatorias | Se mantienen |
Administración | Sin adeudos formales | Requisito ampliado |
¿Por qué la regla de los 30 MDD?
La exigencia de solvencia no surge por casualidad, pues la Liga MX aún arrastra las cicatrices de episodios recientes, en 2019, Veracruz fue desafiliado por múltiples deudas con jugadores y cuerpo técnico, un escándalo que golpeó la credibilidad del torneo.
Algo similar ocurrió con Lobos BUAP, que terminó vendiendo su franquicia ante la imposibilidad de sostenerse en Primera División, estos antecedentes explican la intención de blindar el regreso del ascenso.
La FMF no quiere repetir historias de clubes que llegan, pero se derrumban financieramente a los pocos meses.
Dirigentes aseguran que equipos con historia, como Atlante, Leones Negros o Morelia, tienen proyectos sólidos que podrían atraer inversionistas capaces de cumplir con las nuevas exigencias, y esa es la intención.
En contraste, voces críticas sostienen que el filtro es tan severo que el ascenso podría convertirse en una utopía, si solo uno o dos clubes logran certificarse, la competencia perdería atractivo y el regreso sería más un gesto simbólico que una solución real, pues hasta el panorama podría ser peor.
¿Qué sigue para el regreso del ascenso?
Por ahora, el TAS ya eliminó los candados que bloqueaban de forma absoluta la promoción, el balón está en la cancha de la FMF, que deberá publicar el reglamento actualizado.
Otra de las tareas es definir si estos requisitos aplicarán de inmediato o si habrá un periodo de transición, ya que en un periodo menos a dos años es imposible que alguien quiera invertir tanto dinero en una liga sin crecimiento.