Nadie contaba con Max Verstappen en las quinielas para ser el campeón del Mundo esta temporada. Todo parecía que se iba a decidir entre los McLaren. Entre Lando Norris y Oscar Piastri. La escudería británica construyó una máquina prácticamente perfecta para asaltar el Mundial de una vez por todas tras años de fracasos. En Woking se diseñó un monoplaza bajo el nombre de MCL39. Y desde la primera fecha de Australia se demostró dicha perfección.
Desde la primera cita del campeonato, los McLaren demostraron que tenían el mejor coche de lejos. Con una superioridad aplastante. Oscar Piastri y Lando Norris habían venido ganando a todos y cada uno de sus rivales cada fin de semana. Pero había uno de ellos que no se alejaba del todo. Se aferraba a un milagro. Y ese era Max Verstappen. El ‘coco’. El mejor piloto del mundo y, por supuesto, del momento.
Pese a no tener el mejor coche ni ser el más rápido, Max Verstappen es Max Verstappen y de eso mismo se ha encargado de demostrar en las últimas cuatro carreras del Mundial. Haber ganado cuatro campeonatos del mundo en las últimas cuatro temporadas no ha sido casualidad. El holandés ha vuelto a situarse en la pelea por el campeonato cuando restan cinco Grandes Premios y dos carreras sprint para el final de la temporada. El piloto de Red Bull ha reducido de manera significativa la distancia con los pilotos de McLaren, que ahora sienten la presión acercándose desde atrás.
Un Verstappen perfecto
En los últimos cuatro Grandes Premios, Verstappen ha recuperado 64 puntos respecto a Oscar Piastri, hasta hace poco líder sólido del Mundial. Pese a no disponer del monoplaza más competitivo, e incluso con Ferrari y Mercedes mostrando mayor rendimiento en determinados circuitos, el piloto de Red Bull se ha mantenido constantemente en la zona alta. Su regularidad explica por qué sigue siendo una amenaza real en la lucha por el campeonato.
El panorama del campeonato se mantiene abierto tras el paso por Austin. Oscar Piastri conserva el liderato con 346 puntos, después de una discreta quinta posición en el Circuito de las Américas. Su compañero de equipo, Lando Norris, volvió a recortar distancias y se sitúa a solo 14 unidades del australiano, consolidando una pugna interna que sigue marcando la temporada de McLaren.
Por detrás, Max Verstappen continúa su escalada y ya se encuentra a 40 puntos del líder del Mundial. El neerlandés afronta el tramo final con un objetivo claro: encadenar cinco fines de semana perfectos para mantener vivas sus opciones de título en las últimas carreras del calendario.
¿Qué tiene que hacer el holandés para ganar su quinta corona?
Ahora, la pregunta es sencilla: ¿qué tiene que hacer o pasar para que Max Verstappen acabe remontando y gane el Mundial? El holandés tiene por delante ahora citas favorables, como la de México este fin de semana o la de Brasil dos semanas más tarde. Max no tiene la presión. Nadie contaba con él a estas alturas. Pero quién si la tiene son los dos papaya, que ven por detrás a un monstruo con ganas de volver a reinar en el Mundial.
Las cuentas para Max Verstappen son claras. Si el holandés lograra ganar las siete pruebas restantes del campeonato (cinco carreras y dos sprints) y Oscar Piastri finalizara segundo en todas ellas, el australiano se proclamaría igualmente campeón del mundo por tres puntos de diferencia. En otras palabras, Verstappen no depende únicamente de sí mismo. Y es que necesita que alguno de sus rivales ceda posiciones en alguna de las citas finales para mantener viva la posibilidad de conquistar su quinto título mundial.