Cadillac se ha empeñado en hacer mucho ruido en su entrada en la Fórmula 1 el próximo año. Su jefe, Graeme Lowdon, ha llevado a cabo unas declaraciones en las que muestra y revela las aspiraciones de Checo Pérez y Valteri Bottas de cara a 2026. El que fuera también el máximo mandatario de Virgin y Marussia, reconoció las dos cosas que le harían muy feliz nada más adentrarse en el Gran Circo.
“Hay dos cosas que me harían muy feliz. Ganarme el respeto de los demás equipos, que reconozcan que somos un equipo auténtico y que hacemos un buen trabajo, y ejecutar bien todo lo que hacemos, no dejar nada al azar, no desperdiciar el rendimiento, evitar errores, estar preparados. Si conseguimos hacerlo, entonces seré feliz”, comienza diciendo el jefe de Cadillac en una entrevista con AutoRacer.
Pero desde Cadillac son prudentes y saben que el inicio no va a ser sencillo.“Y entonces, obviamente, Melbourne no será el punto de llegada, sino el punto de partida. Queremos crecer más que nadie, porque la ambición no tiene límites y tenemos los recursos para hacerlo”, añade Graeme Lowdon.
Checo Pérez es optimista
Pero la prudencia del jefe de Cadillac choca y contrasta con el optimismo de Checo Pérez. El piloto mexicano, nada más hacerse oficial su fichaje por el equipo norteamericano, reconoció que no tardarán mucho en luchar por los puntos. “No hay por qué pensar en un resultado negativo, pero estoy seguro que vamos a sorprender y que vamos a estar en los puntos tempranamente en la temporada”. Quizás una opinión algo exagerada teniendo en cuenta que los inicios en la Fórmula 1 no son nada sencillos.
Este mismo martes se dio a conocer que Checo Pérez y Valtteri Bottas tienen nuevo jefe en Cadillac para su entrada en la Fórmula 1 la próxima temporada. La escudería norteamericana, que se convertirá en 2026 en el undécimo equipo de la parrilla, ha fichado a Adam Baker, ex CEO de Audi Formula Racing. Todo ello con un obejtivo claro: luchar por los puntos desde las primeras carreras. El ingeniero británico tiene la laboriosa tarea de volver a dar con la tecla y construir los cimientos que permitan a la formación norteamericana ser competitiva desde su estreno. Su labor no será menor, ya que deberá sentar las bases de un proyecto que apunta alto desde el primer día.
El enigma de Cadillac
El propio Graeme Lowdon no sabe en qué lugar estarán Checo Pérez y Valtteri Bottas en las primeras carreras de 2026, pero lo normal es que sea uno de los equipos más atrasados de la parrilla, por no decir el peor. “No lo sé. Y no es una respuesta vaga: es por respeto al deporte. Incluso los directores de equipo siempre se equivocan en sus predicciones. Así que solo pensamos en hacer bien nuestro trabajo, en que los propietarios se sientan orgullosos, en ganarnos a los aficionados, en cuidar cada detalle. El resto vendrá solo”, zanjó el jefe de Cadillac.
Cadillac, por lo pronto, ya trabaja mano a mano con Checo Pérez en la sede de Charlotte (Estados Unidos). El piloto mexicano estuvo la pasada semana en el lugar donde ingenieros y mecánicos se encuentran trabajando de sol a sol con el objetivo de que la entrada del equipo a la Fórmula 1 se lo menos complicada posible.
Históricamente, todos los equipos que han entrado como nuevos en la Fórmula 1 han sufrido en sus primeros años. No obstante, el agresivo y radical cambio de reglamento que se producirá a partir de 2026 deja en el aire un montón de incógnitas. Y una de ellas es la situación de cada equipo en la parrilla desde la primera cita de Melbourne.