El AEL Limassol sufrió una en el segundo encuentro de Guillermo Ochoa defendiendo en Chipre, pues con la presión de sumar en casa, el equipo cayó 0-2 frente al Akritas Chlorakas en el Alphamega Stadium.
El mexicano Memo Ochoa fue, una vez más, el gran salvavidas, pues con reflejos felinos, evitó que el marcador se desbordara y mantuvo con vida al AEL durante buena parte del encuentro, sin embargo, ni su experiencia ni sus atajadas alcanzaron para rescatar un resultado que deja al club en una situación crítica.
En la grada, el ambiente pasó de la esperanza a la resignación, ya que cada pérdida de balón arrancaba suspiros de desaprobación, y el pitazo final fue recibido con un silencio cargado de decepción, pues aunque Ochoa fue el único que lo intentó, no fue suficiente para evitar la derrota de su equipo que sigue peleando el descenso.
El primer tiempo fue un dominio sin recompensa
El AEL salió decidido a adueñarse del partido, desde los primeros minutos, el equipo amarillo presionó arriba, recuperó rápido el balón y llevó el juego al área rival. Los aplausos se escucharon temprano, sobre todo tras un par de jugadas que hicieron pensar que el gol estaba cerca.
Pero la euforia duró poco, pues las llegadas carecieron de precisión y los centros al área encontraron más camisetas verdes que amarillas. El Akritas Chlorakas, ordenado y paciente, esperó atrás y apostó a las contras, obligando a Ochoa a reaccionar con dos intervenciones que evitaron el gol visitante.
El 0-0 al descanso reflejó el esfuerzo estéril del AEL, incapaz de transformar su dominio en ventaja, siendo más por el mexicano que no fue peor la primera mitad.
Segunda mitad con errores que pesaron caro
El inicio del complemento mantuvo la misma tónica hasta que llegó el quiebre, pues al 66’, Andreas Athanasiou castigó un descuido en la marca y definió con frialdad ante Ochoa para el 0-1. El golpe descolocó al AEL, que adelantó líneas con desesperación y dejó huecos a la espalda de su defensa.
El castigo llegó rápido, ya que penas diez minutos después, al 76’, Athanasiou volvió a aparecer en el área y conectó un cabezazo letal. Ochoa voló a su costado derecho y alcanzó a rozar el balón, pero no fue suficiente.
El 0-2 silenció al estadio que mostraba incertidumbre ante la mala actuación del equipo, sin embargo, Memo se llevó algunos aplausos de la afición.
Ochoa, el líder que no se rinde
Aunque el resultado fue adverso, Guillermo Ochoa volvió a demostrar por qué es el líder del vestidor, pues se mostró seguro en el juego aéreo, dio instrucciones a sus compañeros durante todo el encuentro y evitó que la derrota fuera más dolorosa.
Estadística | Valor |
---|---|
Atajadas totales | 5 |
Balones aéreos ganados | 3 |
Goles recibidos | 2 |
Pases largos precisos | 7/10 |
Despejes con éxito | 4 |
La tabla y el peso de la presión para Ochoa
El revés dejó al AEL Limassol en una posición incómoda, pues con apenas 4 puntos en cinco jornadas, rezagado en la parte baja de la clasificación y con una diferencia de goles que preocupa.
Posición | Equipo | Puntos | GF | GC |
---|---|---|---|---|
6 | Akritas Chlorakas | 7 | 8 | 7 |
8 | AEL Limassol | 4 | 5 | 9 |
Un vestidor bajo la lupa
Dentro del club, la tensión es palpable, pues el entrenador Paolo Tramezzani sabe que el margen de error es mínimo y que los próximos compromisos serán determinantes para su futuro.
El papel de Ochoa y de los veteranos será clave para mantener unido al vestidor y evitar que la presión externa rompa al grupo, pues se sabe que la experiencia del arquero mexicano puede ser un factor para sacar al equipo del bache.