La quinta ronda del Draft 2025 de la NFL regaló una de esas escenas que quedarán en la memoria por lo inusual, pues los Baltimore Ravens tenían todo listo para acabar con la inesperada caída de Shedeur Sanders.
El joven mariscal de campo hizo algo impensado, rechazó la oportunidad de jugar junto a Lamar Jackson, pues prefirió esperar, aunque eso significara alargar su incertidumbre. Pocos minutos después, la llamada llegó desde Cleveland y su futuro tomó otro rumbo.
El “no” a los Ravens en una sacudida inesperada
Adam Schefter de ESPN fue el primero en confirmarlo en la Semana 2 de la NFL, los Ravens estaban a punto de elegirlo en la tercera selección de la quinta ronda, sin embargo, antes de que el anuncio se hiciera oficial, Sanders pidió no ser tomado.
La razón fue tan simple como contundente, en Baltimore no tendría espacio real para desarrollarse, pues con Lamar Jackson como estrella intocable y líder absoluto de la franquicia, la posibilidad de ver acción era prácticamente nula.
Para un novato, aceptar esa situación significaba resignar años de aprendizaje en la banca, sin chances de demostrar de qué estaba hecho, por lo que la decisión de estar detrás de Jackson parecía compleja.
El gesto sorprendió a todos, en la NFL, pues los novatos suelen aceptar la selección sin cuestionar nada, y más si se trata de una franquicia con proyecto interesante como los Ravens, pero Sanders rompió ese molde y dejó claro que su prioridad no era la comodidad de un equipo ganador, sino la posibilidad de tener un camino propio.
El destino fue Cleveland Browns en el pick 144
La caída no duró mucho, tres elecciones después, los Cleveland Browns levantaron la mano y pusieron fin al suspenso con la selección número 144.
Aunque Sanders llegó como el tercer mariscal de campo en la lista, el panorama en es muy distinto al que le esperaba en Baltimore.
Joe Flacco, que a los 40 años vive una especie de segunda juventud, sigue como titular, Dillon Gabriel, novato con un buen cierre de pretemporada, se ganó la confianza inicial como suplente.
Sanders arrancó como la tercera opción, pero la diferencia es clara: aquí tiene la puerta entreabierta para colarse más rápido en la conversación.
| Jugador | Edad | Estatus en el roster | Perspectiva 2025 |
|---|---|---|---|
| Joe Flacco | 40 | QB titular | Últimos años de carrera |
| Dillon Gabriel | 23 | QB suplente | Ventaja inicial como número dos |
| Shedeur Sanders | 22 | QB reserva | Proyecto a mediano plazo |
Sanders vs. Gabriel: un duelo que apenas comienza
El primer gran reto de Sanders en la NFL será ganar la batalla interna contra Dillon Gabriel, ya que los dos llegan como proyectos interesantes, aunque con perfiles diferentes, el gran reto es saber que son de generaciones seguidas, por lo que eso da un toque importante a la rivalidad.
Gabriel demostró rapidez para adaptarse al sistema ofensivo, mientras que Sanders carga con el peso de un apellido histórico y un talento que muchos scouts aún consideran superior, así que la presión y paciencia parecen ser el mayor reto de Sanders.
¿Fue la decisión correcta?
Decirle “no” a Baltimore fue arriesgado, pero también estratégico, pues con Jackson delante, el techo estaba sellado. En Cleveland, en cambio, las oportunidades pueden llegar más pronto.
¿Puede ser el futuro de los Browns?
La pregunta que todos se hacen en Cleveland es la misma: ¿puede Sanders ser el quarterback que cambie la historia de una franquicia marcada por la inestabilidad en esa posición? pues a pesar de que parecía que sería el jugador más codiciado del Draft 2025, la realidad fue otra.
El camino no será sencillo. Tendrá que superar a Gabriel, esperar el declive de Flacco y, sobre todo, demostrar que su decisión de rechazar a los Ravens fue un movimiento visionario y no un error que lo persiga durante años.
Sanders tiene el apellido, el carisma y el talento, pero la NFL es despiadada, pues no espera a nadie. Ahora le toca transformar esa narrativa en resultados dentro del campo.
De esto dependerá que su historia sea recordada como la de un rebelde que cambió su destino o como la de un novato que apostó demasiado pronto con tal de acelerar su proceso.