El Real Madrid echó a andar esta semana en Liga y lo hizo con un triunfo por la mínima ante Osasuna gracias a un tanto de Kylian Mbappé desde los once metros. Un triunfo que dejó muchas cosa buenas, pero también dejó en evidencia el trabajo que aún le falta al equipo de Xabi Alonso que sigue arrastrando un problema en el centro del campo que, a falta de fichajes, podría encontrar la solución en Eduardo Camavinga.
Arda Güler necesita más
Ante Osasuna el Real Madrid mostró que quince días de pretemporada no son suficientes. Hay aún cosas que pulir y una de ellas está en el centro del campo donde la confianza de Xabi Alonso sigue puesta en Arda Güler, pero el turco tiene algunas carencias que no se asimilan de un día para otro. El talento del jugador blanco es indiscutible y tiene un control del esférico y una proyección en ataque sobresalientes, pero el equipo necesita algo más. Ante un rival encerrado atrás como Osasuna, a Gúler le faltó mover al equipo y generar los espacios para que sus compañeros pudieran encontrar el camino para percutir al rival. Además, su binomio con Fede Valverde no funcionó. El turco está bien en su papel de Modric, pero le falta un Toni Kroos al lado que le de soporte. El club ha sondeado el mercado, pero no parece convencido a dar ningún paso en este sentido por lo que hay que buscar los refuerzos en casa.
Camavinga, un refuerzo de lujo
Ese refuerzo podría ser Camavinga. Xabi Alonso tiene mucha confianza en el francés y desde el club se le considera ese fichaje para el centro del campo. El objetivo del entrenador es claro y quiere sacar todo el potencial de un centrocampista al que aún no ha podido poner a prueba. Los planes de Xabi Alonso con Camavinga comenzaban por ser el primero de la lista para suplir la ausencia de Bellingham en el centro del campo. Lo ve en distintas posiciones en la parcela ancha dependiendo del esquema y las necesidades del partido. Tras una temporada muy irregular, se quiere que el jugador siga la progresión que llevaba desde su llegada al Santiago Bernabéu y se convierta en un hombre importante.
Mala suerte con las lesiones
Para ello necesita el francés que las lesiones le respeten. Y es que este no ha sido el año de Camavinga en este sentido. A lo largo de la pasada temporada, el jugador no estuvo en 33 de los 68 partidos que disputó el conjunto blanco por lesión. La última de ellas le dejó fuera de combate también para el Mundial de Clubes al que llegó para el último partido ante el PSG, pero no tuvo minutos. Se contaba con él para el inicio de curso, pero un contratiempo en forma de esguince durante un entrenamiento no le permitió estar ante Osasuna y ahora apura sus opciones para entrar en la convocatoria ante el Real Oviedo aunque no apunta a estar en el once titular.
El club confía en el francés
Durante este verano son muchos los rumores de salida del jugador con el Manchester United como uno de sus principales pretendientes. El club ha tenido siempre claro que la puerta para Camavinga estaba cerrada. Se ha especulado con un precio de salida de 80 millones y que el club estaría escuchando ofertas, pero lo cierto es que tanto Xabi Alonso como el Real Madrid tienen claro que el centrocampista se queda y tiene que ser un jugador importante. Ni el jugador ni su entorno quiere hacer las maletas y en el club apuestan por Camavinga.