Dos tenistas con la letra ñ, la más española, en su apellido, Carreño y De Miñaur, se han hecho con el título en las dos ciudades chinas donde hoy se disputaban dos torneos ATP 250: Chengdu y Zhuhai
Carreño, victoria trabajada frente al bombardero Bublik
Es difícil vencer a un tenista que te endosa 31 aces en un partido, pero Carreño ha conseguido superar hoy al kazajo, que en este torneo ha completado un total de 125 saques directos contra sus rivales. Un auténtico bombardero, que no solo saca los primeros con potencia, sino también muchos de sus segundos saques (de ahí sus 11 dobles faltas en la final). Hoy, en el partido por el título, ha llegado a conectar un segundo servicio a 221 km/h. Pero Carreño es un tipo con paciencia. Ya lo demostró ayer con Shapovalov, donde completó una estadística increíble, convirtiendo dos rupturas del servicio del canadiense anotándose tan solo 10 puntos al resto en todo el partido. Eso es esperar la oportunidad idónea para, tal y como dijo Agassi en su día, ganar todos tus servicios y romper una vez el del rival. Según la leyenda de Las Vegas, fácil.
Primer título del asturiano tras más de dos años de sequía
Desde Estoril 2017 no ganaba un título Carreño, con lo que hoy corta una sequía de dos años y cuatro meses, un dato para celebrar. Es su cuarto título al máximo nivel, tras el mencionado Estoril y los de Moscú y Winston-Salem en 2016. Pero más que por el título, Pablo estaba muy contento por haber superado por fin sus múltiples lesiones, que le han tenido saliendo y entrando de las pistas en estos últimos tiempos. El español cortó el camino al que habría sido el primer título profesional de Bublik, que ya ha caído dos veces en esta última ronda tras Newport en este año contra John Isner.
De Miñaur, el australo-hispano, se lleva el trofeo en Zhuhai
Si algo ha caracterizado a Alex De Miñaur esta semana ha sido la consistencia. Ya nos asombró en su partido de octavos contra Andy Murray, donde consiguió doblegar al escocés a base de darle de su propia medicina: siempre volvía la bola de vuelta al campo del bueno de Andy. Siguió como una apisonadora devolviéndolo todo con su asombrosa flexibilidad (es el único jugador, además de Djokovic, que resbala con asiduidad sobre pista rápida) contra Borna Coric, y barriendo a Bautista en semifinales por 6-2, 6-2 a base de pelear hasta la extenuación cada punto. Como dice siempre Rafa, jugando cada bola como si te fuera la vida en ello. Grandes rallies de más de 20 golpes en muchos puntos en todos esos partidos, tónica que no le ha abandonado en el partido por el título. Sin embargo, Mannarino, sobre todo en el primer set, ha conseguido plantar cara con su tenis más técnico y más directo, aunque cedió el tie break del primer set, claramente más nervioso que el joven australiano, que vive y entrena en Alicante. El segundo set corrió por los mismos derroteros hasta que De Miñaur ha conseguido romper el servicio del francés (tras 12 intentonas fallidas) con 5-4 a su favor y se ha embolsado el trofeo.
Un gran año para el Next Gen australiano
Tercer título en este año (y en su corta carrera) para el Next Gen tras Sydney y Atlanta, lo que lo suma al selecto club formado por Djokovic, Federer, Medvedev y Thiem. Solo Nadal ha ganado un título más que él en este año 2019. Además, saltará al puesto 25 de la ATP el lunes, lo que lo acerca mucho al top 20 y lo reafirma como tercero en la lista de la clasificación para Milán. En contraposición, es la séptima final que pierde Mannarino, que consiguió levantar su primer (y único) trofeo ATP este año en Hertogenbosch, tras seis finales fallidas. El veterano francés se acercará mucho al top 50 mañana lunes tras esta final disputada en tierras chinas.
Fuente de datos e imágenes: www.atptour.com
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