El año 2017 está terminando y en Zaragoza, ha sido un año en el que la ciudad ha podido volver a ilusionarse con el fútbol sala. Tras un final de temporada 16-17 descafeinado, ha llegado un inicio de temporada 17-18 en el que Ríos Renovables Zaragoza ha rendido a un nivel que no se recordaba por la capital aragonesa desde el año 95 en el que el Pinturas Lepanto consiguió alzarse con el título de liga.
El año, comenzó con decepción. El equipo se quedó fuera de la Copa de España de Ciudad Real. Una primera vuelta decente puso a los de Santi Herrero en disposición de luchar su clasificación para el evento casi hasta el final. No pudo ser. Se les escapó el objetivo que se habían marcado a principio de año y este hecho afectó al desarrollo de la segunda mitad de temporada. Tan solo cuatro victorias en el final de temporada que dejaron al equipo viviendo de las rentas de la primera vuelta en tierra de nadie. Sin nada a lo que aspirar.
Tras el verano, el equipo se presentaba con la ilusión de hacer un buen papel en la nueva temporada. Varias caras nuevas en la plantilla –Trasobares y Anás volvíeron al equipo y Thiago Cabeça se incorporó procedente del Intelli de Brasil– y la guardia pretoriana de las temporadas anteriores –Nano Modrego, Retamar, Adri Ortego, Iván Bernad, etcétera- para tratar de asaltar las ocho primeras posiciones y mucha cautela. Un plantel cargado de aragoneses para devolver a la ciudad de Zaragoza la ilusión. Aunque, ante todo, no se pretendía que se disparase la euforia antes de tiempo. Habría que tener paciencia con el equipo.
La temporada empezó con dudas. Siete puntos –dos victorias y un empate- en los ocho primeros partidos parecían presagiar una temporada, de nuevo, complicada para los maños. Nada más lejos de la realidad. Los blanquiazules no conocen la derrota desde entonces y ya son nueve partidos de liga los encuentros que Ríos Renovables Zaragoza lleva sin perder -victoria contra Movistar Inter y empate a domicilio frente a Palma Futsal incluidos- .
A la ecuación, hay que sumar la clasificación para la Copa de España en el WiZink Center de Madrid, antes de la última jornada, por el camino y una andadura excelente en la Copa del Rey en la que ya están en Semifinales.
Con los resultados obtenidos hasta ahora, estamos hablando de la mejor racha del AD Sala 10 en su historia y, tanto Santi Herrero, como su plantilla deben estar muy orgullosos. Se han convertido en un equipo correoso y difícil de ganar. Su defensa en zona se atraganta al más pintado y los jugadores han demostrado una gran capacidad de sacrificio.
Solo queda esperar que la gente de Zaragoza se ilusione con su equipo y comience a llenar las gradas del Siglo XXI partido tras partido para ser el sexto jugador. El espíritu del Pinturas Lepanto ya está en el parqué, esperemos que también vuelva a las gradas.
Imágen destacada vía www.lnfs.es
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