La importancia de no rendirse

Tercera jornada de Euroliga Femenina a la que las salmantinas llegaron con el ánimo subido en lo que se refiere a competiciones europeas tras vencer al gran Ekaterimburgo en la jornada anterior. Además, juegan en su fortín, donde como siempre, las gradas se encuentran teñidas de azul y rugen al mismo tiempo que las jugadoras se dejan la piel en el campo. En este partido, y tras unos últimos minutos que quedaran grabados en nuestra retina, las charras se proclamaron vencedoras 62-57.

El primer cuarto comenzó con energía por parte de los dos equipos, y los puntos no tardaron en llegar por ambas partes. En el equipo local, el marcador lo estreno Erika de Souza mientras que en las visitantes, lo estrenó Leonor Rodríguez en su vuelta a las pistas españolas y, en especial,  a una que conoce muy bien tras haber disputado en ella tres temporadas consecutivas. A lo largo de la primera mitad del cuarto se mantuvo un ciclo de carreras, tiros y faltas por ambas partes que provocó que hasta pasado los cinco minutos, el empate se mantenga. La parte interesante llegó en los últimos  minutos, donde primero las charras se adelantan en cuatro puntos, a lo que después las polacas respondieron volviendo al empate y superándolas para que con el pitido final se encuentren por encima con un 13-18 en el marcador.

La segunda parte comenzó con rotaciones, cuatro jugadoras por parte de las charras y una por la polacas. Miguel Ángel Ortega quería intentar eliminar, mantener o reducir la ventaja para llegar al descanso con opciones. Para ello, empleó sus jugadoras, a las que se veía con energía y la misma mentalidad que el entrenador. Givens comenzó anotando los dos tiros, tras sufrir una falta. Una sucesión de fallos por parte del Perfumerías hizo que la diferencia llegase a su punto máximo en los minutos disputados, poniéndose a 7. Laura Nicholls llegó para poner fin a estos minutos.  Las polacas parecían ver una luz que les indicaba una victoria sin muchas complicaciones, y se colocaron en el descanso con un más nueve en su marcador.

Tras el descanso, y con rotaciones en ambos equipos, Nicholls volvió a ser la primera en sumar puntos para el marcador local y hasta casi los cinco minutos de juego, fueron capaces de ir sumando puntos y conseguir que las rivales no anotaran. Ambos entrenadores querían mantener por una parte la victoria y por otra, conseguirla, por lo que rotaron a bastantes jugadoras. Un vaivén de canastas hizo que ambos equipos se fuesen acercando y alejando en el marcador, y ninguno de los dos perdiese la intensidad y las ganas de dejar claro el resultado y que el último cuarto fuese un mero trámite. Un marcador 43-45, dejó prever que el último iba a ser de esos que le gustan a todo amante del buen baloncesto, con mucha garra e intensidad para alcanzar una victoria no muy clara en este punto.

Último cuarto para enmarcar por parte de ambos equipos, que comenzó a la altura de lo que luego fue, con dos triples, uno para cada equipo. A lo largo del cuarto se mantuvieron ambos equipos en un tira y afloja con una máxima diferencia de cinco puntos a lo largo de todo el cuarto. Hay que destacar los últimos dos minutos, en el que cuando Avenida iba con ventaja, una canasta de Leo puso una diferencia de tres puntos, que, con tiempos muerto de por medio y con mucha tensión, dejando a los aficionados sin uñas, solo consiguió aumentarse con dos tiros libre anotados por Robinson, del equipo local.

De esta forma, puso fin el partido con un 62-57 en el marcador de un Würzburg que vibraba en las gradas al mismo tiempo que lo hacían sus jugadoras en la pista. Esta temporada, las salmantinas han empezado con muy buen pie la Euroliga, ganado los tres encuentros disputados.

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FOTO DESTACADA VIA: PERFUMERÍAS AVENIDA (Alejandro Lopez)