Tras su corto paso por la masía del Fútbol Club Barcelona donde jugó en el Infantil B acompañado de Jordi Alba, Aleix Vidal volvía al equipo culé a cumplir el sueño que se le había atrancado de pequeño. Siempre destacó por su velocidad, pero según comentan algunos familiares sus virtudes principales son la constancia y la fuerza voluntad. En estas características se apoyó para lograr lo que tanto ansiaba desde niño: convertirse, a toda cosa, en futbolista profesional. Tal es así, que estuvo también en las categorías inferiores del Real Madrid y del RCD Espanyol.
Con este objetivo, su carrera ha sufrido muchas idas y venidas que lo llevaron a jugar en varios clubs. La carrera de Aleix comienza a ser notable tras su fichaje por el Sevilla F.C. en 2014. Rápidamente se convirtió en un fijo en el equipo para Unai Emery. Cada vez tenía más peso e intercalaba las posiciones de extremo y lateral según las necesidades del equipo. Su buena temporada le abrió las puertas para la Selección Española y despertó el interés del Barcelona. Los catalanes estaban buscando un lateral derecho ante la marcha de Dani Alves, quien abandonaría el equipo la temporada siguiente.
En verano de 2015 se hace oficial el fichaje de Aleix por el F. C. Barcelona. Por aquella época la sanción FIFA impedía al equipo realizar fichajes. No le importó a Aleix aceptar el reto y esperar hasta enero de 2016 para poder jugar. Sin embargo, no ha tenido la continuidad que todo jugador necesita. Además no ha terminado de convencer en la demarcación de lateral y sus partidos más destacados han sido de extremo.
El problema es que el equipo precisaba de un lateral y se fichó a un extremo que en ocasiones había cumplido como lateral. La posición por naturaleza de Aleix era la de extremo. El Barcelona se dejó deslumbrar por uno buenos partidos suyos como lateral. En su temporada con el Sevilla se defendió bastante bien en esa demarcación porque jugaba de carrilero. Sin embargo, en los partidos que ha jugado en Barcelona se nota que no termina de coger la posición.
Aleix ha tenido que vivir momentos muy duros como jugador del Barcelona. El entrenador por aquella época, Luis Enrique, no contaba para nada con él. Tal es así que la temporada pasada el lateral derecho del equipo fue Sergi Roberto, el joven mediocentro canterano que cumple siempre le pongas donde le pongas. Una vez más Vidal no se rindió y siguió trabajando para conseguir volver al equipo y ganarse un puesto. Y lo estaba consiguiendo, pero justo cuando mejor le iba se lesionó para el resto de la temporada. Otra vez le tocó luchar para volver a jugar y así lo hizo. Consiguió recuperarse a tiempo para disputar los últimos minutos de la final de la Copa del Rey.
A sus 28 años, parecía que esta iba a ser su temporada. En principio, los planes dejaban ver que el nuevo fichaje, Semedo, y él se disputarían el lateral derecho. No obstante, parece ser que a Valverde tampoco le convence como lateral ya que ahí están jugando Sergi o Semedo. Aleix está disputando esta temporada más minutos de extremo. Los últimos días ha dejado a Deulofeu, quien parecía era el mejor candidato a sustituir al lesionado Dembélé, en el banquillo.Por otro lado, se rumorea que el jugador catalán ha recibido varias ofertas. Además da la sensación de que se entiende muy bien con Messi y su lateral correspondiente, ya sea Sergi o Semedo.
La cuestión es que debería hacer el F. C. Barcelona: ¿venderlo, confiarle el lateral derecho o utilizarlo como extremo, posición donde aparenta defenderse mucho mejor?
Foto:Reuters
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