Real Murcia y Olot necesitan un respiro y, al mismo tiempo, seguir carburando la maquinaria para que funcione en Liga como es debido. La tercera ronda de Copa se presenta como el aliciente perfecto para olvidar los males del campeonato regular y disfrutar durante unos minutos de la competición del ‘KO’, que puede dar acceso al premio gordo de jugar contra un club en competición europea. Una recompensa muy jugosa para dos conjuntos que suman, entre ambos, 8 puntos de los 15 disputados hasta el momento en Liga.
Quizás el caso más sangrante es el del club pimentonero, que tan solo ha logrado un triunfo en cinco partidos cuando su objetivo indiscutible es la primera plaza del Grupo IV. La derrota ante el UCAM por 1-2 en el último encuentro ha hecho saltar todas las alarmas y ha puesto en entredicho la aptitud de Manolo Sanlúcar como técnico grana, quien no supo gestionar al equipo tras la expulsión de Santi Jara al cuarto de hora de partido. Se espera que sepa sacar mucho más jugo de sus futbolistas del que ha conseguido hasta ahora, y debe demostrarlo cuanto antes si no quiere verse en el paro en cuestión de días.
A pesar de que sus jugadores salieron “jodidos” el pasado sábado, el técnico gaditano afronta con aire renovado un choque que puede dar paso a una importante inyección económica en el club. “La copa siempre ha sido importante para el club, además de ilusionante para la plantilla. Estamos a este partido de cumplir el objetivo de meternos en dieciseisavos, así que vamos a intentar conseguirlo sabiendo la dificultad”, explicó Sanlúcar, quien avisó de que “no hay un grado de confianza ni de relajación de cara al partido”.
Para la contienda ante el Olot, la lista de convocados grana es una incógnita, aunque se espera que entren en ella jugadores que no han tenido oportunidades en Liga, como Juanma, Mateos o Nadjib. Por su parte, Santi Jara y Biel Ribas pueden ser incluidos en la lista, ya que deberán cumplir en Liga las sanciones por sus respectivas expulsiones ante el UCAM. Quien será duda hasta última hora será Fede Vega, que está ultimando la recuperación de la lesión que le ha mantenido al margen del equipo durante las últimas dos semanas.
Un recién ascendido con derecho a soñar
Tampoco el Olot ha tenido el comienzo que habría deseado para su retorno a la Segunda B, división en la que compite por tercera vez en su historia. Tres empates es el balance de la escuadra que dirige el exjugador argentino Martín Posse, quien, curiosamente, estuvo en la agenda del Real Murcia en 2005 para ocupar la delantera del equipo. El cuadro gerundense no tiene otra meta en la cabeza que no sea la permanencia en una categoría que alcanzó tras ser campeón del grupo VI de Tercera y vencer al Sporting B en la eliminatoria de campeones.
Acompañar la consecución de ese objetivo con un partido ante un grande de España que llene las arcas de la entidad sería una muy buena forma de intentar asentar el proyecto de la UE Olot en Segunda B. “Competiciones como esta se viven de manera diferente, sabes que es un partido único y que estás a un paso”, admitió Posse, que también advirtió de que sus jugadores están “preparados” e “ilusionados” con el reto de alcanzar los dieciseisavos de final. “Nos enfrentamos a un equipo con un presupuesto mayor, con un buen campo, con una buena plantilla pero, en definitiva, es la misma categoría; les respetamos, pero estamos al 50%”, explicó el argentino sobre el rival y la capacidad del Olot para derrotarlo.
El equipo olotense viajará en avión el mismo día del partido para favorecer el descanso de sus jugadores de cara al próximo encuentro liguero frente a la Peña Deportiva de Ibiza. En ese vuelo no viajarán Dembo, Yeray y Guzmán, aunque sí lo harán dos viejos conocidos para la afición pimentonera: el lateral derecho José Martínez y el centrocampista Nacho Pérez.
Fotomontaje: @Crus_ccf
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