El Real Madrid Castilla se impuso al Coruxo en O Vao en una segunda parte en la que los blancos salieron muy acertados, cogiendo por sorpresa a los locales. Los tres puntos se fueron para Madrid tras demostrar en 45 minutos que tienen algunas cosas que decir esta temporada.
O Vao se estrenó este año en la competición acogiendo el último partido de la jornada. Ambos conjuntos lo afrontaban con la misma necesidad: estrenar el casillero. Ninguno tuvo un buen estreno, por lo que puntuar se antojaba clave para empezar a coger un poco de aire. La primera parte sirvió para poner las cartas sobre la mesa y tantear el terreno, donde las defensas fueron las grandes protagonistas. En la segunda mitad, el filiar merengue salió muy enchufado, adelantándose en el marcador a los pocos segundos de la reanudación y cerrando el partido poco después.
Los de Solari se empezaron a asomar al área local poco después de empezar el partido con un tiro de Jaume seguido de otro disparo de Arturo que atajó Alberto Domínguez. El juego no era muy fluido, con mucho pelotazo debido a la presión de ambos conjuntos, lo que derivaba en imprecisiones por los dos lados.
Conforme iban pasando los minutos, los de Rafa Sáez conseguían llegar tímidamente al área rival. En una de estas aproximaciones, Rafa Mella tuvo una clara ocasión tras una contra muy bien montada por los vigueses, pero se topó con las manos de Belman. Poco después respondieron los mirlos: Mancebo ponía a prueba a Alberto Domínguez, y este aceptaba el reto y lo superaba.
Las defensas se iban imponiendo, sobre todo la del Coruxo, que desbarataba las internadas de los visitantes, casi siempre peligrosas. Los vigueses aprovechaban las recuperaciones de balón para montar contras y amenazar la meta visitante, pero el filial blanco también se defendía bien. El partido seguía equilibrado cuando Dani Gómez tuvo una de las mejores ocasiones de su equipo en las botas, pero mandó el cuero por encima del larguero.
Poco antes del descanso tuvieron Silva e Higón dos buenas ocasiones para adelantar al Coruxo, pero se perdieron por poco por la línea de fondo. Se llegaba al intermedio con tablas en el marcador y en juego, pero tras la reanudación el partido dio un cambio de 180º. Apenas unos segundos después de poner el balón en juego, Dani Gómez inauguraba el luminoso. Los de Rafa Sáez no salieron enchufados, y el delantero blanco lo aprovechó para adelantar a su equipo.
Parecía que las cosas no le salían a los vigueses, pero lo seguían intentando. Mientras, el RM Castilla intentaba controlar un poco el ritmo del partido, para dormirlo, pero no lo terminaban de conseguir. Tras un intercambio de jugadas, los blancos hacían el segundo tanto en un saque de esquina rematado por Arturo.
Ante esta situación, Rafa Sáez optó por mover el banquillo. Entraban en el terreno de juego Quique Cubas y Pibe para intentar cambiar el rumbo del partido, pero Solari también metía hombres de refresco para mantener la tónica.
Pibe e Higón pusieron a prueba los reflejos de Belman en varias ocasiones, pero el meta blanco mantenía su portería cerrada. Los jugadores de la Fábrica empezaban a combinar entre ellos de una forma que no habían hecho hasta el momento, lo que le sirvió a Campuzano para volver a perforar la portería local. A pesar de la ventaja, los blancos no cejaban en su intento de seguir ampliando la diferencia, pero Alberto Domínguez se convirtió en un muro.
Al final, tres puntos con los que el Castilla estrena su casillero, acompañados en momentos con buen juego. El Coruxo, por su parte, tiene aún margen de mejora y de reacción.
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