Joan Capdevila y Rubén Gracia, más conocido como Cani, decidieron colgar las botas definitivamente durante el martes de esta semana. A los 39 y 36 años respectivamente, ambos han decidido cerrar un capítulo de sus vidas que siempre se mantendrá en el recuerdo de muchos aficionados al fútbol. Cani, tras una última vuelta al equipo de sus amores, el Zaragoza, decidió en conjunto con la directiva rescindir el año que le quedaba de contrato y dejar paso a nuevos jugadores que puedan luchar por el ascenso a la categoría reina del fútbol español. Por parte de Capdevila escogió al Santa Coloma como el último club de su carrera deportiva. A sus 39 años estaba ya establecido que, tras disputar la primera ronda de la fase previa de la Champions League junto al equipo, dejaría los terrenos de juego definitivamente en caso de derrota. Y así fue.
Cani empezó su carrera deportiva en la cantera del Zaragoza. Jugador aragonés, club aragonés y una calidad y compromiso con el fútbol enormes son una combinación que no pasa inadvertida para unos aficionados, que lo consideran ya como uno de los grandes nombres que han surgido de la cantera aragonesa. Tras dar sus primeros pasos en el conjunto maño, fue traspasado en el 2006 por 8,4 millones de euros al Villarreal.
Desde año en adelante, Cani defendió la camiseta groguet durante 9 años en los que llegó a jugar un total de 327 partidos con el club, siendo el tercer jugador de la historia del Villarreal en el fútbol profesional con más partidos disputados. Un futbolista que más que simples estadísticas, demostró su predisposición por el club quedándose en el equipo tras el fatídico descenso a Segunda en el 2012. ¿Con jugadores así cómo no se iba a poder ascender al año siguiente? Su extensa carrera de amarillo vio su fin en el 2015 con su salida, en calidad de cedido, al Atlético. Tras ello, dio un fugaz paso en la siguiente temporada por el Deportivo, para acabar volviendo al club que le vio nacer en el mundo del fútbol. Con la misma camiseta con la que se estrenó en el 2001, decidió fin a 15 años de carrera futbolística.
Por parte de Joan Capdevila, el jugador catalán empezó su carrera deportiva en el 1996 jugando con la camiseta del UE Tarrega. Desde ahí pegó el salto al filial del Espanyol, estrenándose con la camiseta perica del primer equipo en 1998. Tras destacar en el conjunto barcelonés, fue traspasado al Atletico de Madrid donde se quedó solo una temporada. Fue vendido al Deportivo donde se forjó un nombre dentro de la primera división española. 7 temporadas defendiendo la camiseta blanquiazul en Riazor marcaron su carrera en el fútbol español, jugando un total de 244 partidos en el club gallego. Pero como dijo el propio Capdevila hace unos años en una entrevista, sus mejores momentos como futbolista los pasoócomo groguet: “Pasé mis mejores años en Villarreal, fue inolvidable. Gracias a ellos pude ir a una Eurocopa. Estoy muy contento por el trato del club y por la oportunidad que me dieron“.
En el 2007 fue traspasado al submarino amarillo, donde se adueñaría del lateral izquierdo tras la marcha de Arruabarrena. Consiguió algo que parecía muy complicado, conseguir no notar la falta de uno de los mejores laterales que ha pasado por el Villarreal. Grandes éxitos le acompañaron mientras que vestía la camiseta amarilla. 181 partidos después, decidió poner marcha en el 2011 al Benfica donde estuvo solo un año. Volvió al Espanyol en 2012, donde se mantuvo dos temporadas más al más alto nivel del fútbol español. Desde entonces un paso fugaz por ligas menores, vieron su fin con un último paso por el Santo Coloma de Andorra durante el día de ayer.
Ambos dejaron una huella importante dentro del Villarreal. Fueron jugadores importantes en un equipo que empezaba a ser asiduo en competiciones europeas de alto nivel como la Champions League. Ambos formaron parte de uno de los grandes éxitos del submarino amarillo en LaLiga: el subcampeonato de la temporada 2007-2008. Un éxito comparable a las semifinales de UCL que se alcanzaron en el 2005-2006 con el equipo liderado por Riquelme, Senna, Forlán entre otros. Capdevila fue uno de los dos representantes, junto a Marcos Senna, del Villarreal en la selección española que conquistó la Eurocopa 2008. Siempre quedará en el recuerdo el hecho de que Cani se mantuviera con el equipo tras el descenso, siendo uno más en el posterior ascenso a Primera al año siguiente.
En la memoria groguet quedarán grandes partidos como el 3-2 al Real Madrid en 2008 con goles tanto de Cani como de Capdevila, en un partido que se ganó con gol del jugador catalán en el minuto 91. O la victoria por orgullo, tras perder 4-1 de visitantes contra el Porto en las semifinales de Europa League en 2011, marcando ambos dos goles para dejar el resultado en 3-2.
Pero todo tiene un punto y final. Ambos formaron parte de una gran generación de futbolistas y hoy toca darles las despedida.Tras 16 años de Cani y 20 de Capdevila, toca darle un punto y final como futbolistas, pero quien sabe si un punto y aparte dentro del fútbol. Mientras tanto, GRÀCIES PER TOT.
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