Tras la impuesta sanción de 21 meses de prisión para Leo Messi, y los 15 de Jorge Messi, el revuelo formado en la prensa ha sido tal, que pocos se han parado a pensar porqué verdaderamente este futbolista no entra en la cárcel como otros defraudadores. La explicación es simple.
Leo Messi ha defraudado a Hacienda un total de 4’1 millones de euros durante los años 2007, 2008 y 2009, en los cuales su carrera estaba en crecimiento puro. En teoría, lo que se denuncia es el no haber declarado los ingresos de 10’1 millones de euros relacionados con sus derechos de imagen.
Dicho fraude tiene como pena asociada un total de 21 meses de cárcel, tal y como se ha comentado, aunque en este caso, para su padre se ha rebajado a quince porque su hijo ha devuelto el dinero defraudado. Y es gracias a esta devolución por lo cual Messi no pisará un calabozo.
Es simple, en caso de que hubiera defraudado 1 euro, si ese euro es devuelto, no habría posibilidad de entrar en prisión por condena alguna, ya que el juez considera esto un arrepentimiento. Mientras tanto, en caso de que no lo haya devuelto o en caso de que el juez considere que la actitud del acusado es pasiva, tal y como ocurrió con el expresidente del F.C. Barcelona, José Luis Núñez varios años atrás.
Es por ello por lo que el símbolo barcelonista no accederá a prisión, no porque sea profesional, ni porque la condena sea inferior a 24 meses, sino porque ha abonado las cantidades defraudadas, cosa que no le exime, en ningún caso, de abonar la cantidad de 1’5 millones de euros por su parte, y de 1’3 por la de su padre.
Imagen: Listin Diario.
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