Josef Dieter “Sepp” Maier, exfutbolista alemán, ha sido galardonado con el One Club Man, premio que otorga el Athletic Club a aquellos jugadores que, fuera del equipo rojiblanco, han desarrollado la totalidad de su carrera deportiva en un mismo club. Maier, también apodado como El Gato, jugó como portero en el Bayern de Munich entre 1966 y 1979 y, tras un accidente de coche a los 35 años, colgó los guantes para convertirse en el entrenador de porteros del club bávaro. Más de 50 años dedicados a un mismo equipo que le avalan para recibir este galardón.
Maier jugó un total de 473 partidos en la Bundesliga, 442 de manera consecutiva. Una cifra elevada y acompañada de un puñado de copas, y es que El Gato ganó la friolera de 4 Bundesligas, 1 Copa de Alemania, 3 Champions League y 1 Copa Intercontinental con el Bayern. En esa línea, el guardameta también tocó el cielo con la selección alemana, ya que conquistó tanto una Eurocopa como un Mundial. Además, Maier obtuvo en 3 ocasiones el trofeo como mejor futbolista alemán del año y en 2004, Pelé le incluyó en el FIFA 100, una lista realizada por el crack brasileño en la que figuran los mejores futbolistas vivos (123 hombres y 2 mujeres).
El guardameta se convierte de esta forma en la tercera persona en obtener el One Club Man, trofeo que hasta la fecha habían recibido Matt Le Tissier y Paolo Maldini, jugadores con sendas carreras en el Southampton FC y en el AC Milan respectivamente. Un galardón que representa la fidelidad y el sentimiento de los jugadores hacia su club. En esa línea, Maier ha confesado que sólo jugó en el Bayern debido a que “con los bávaros es lo mismo que con los vascos”. “Si eres bávaro entonces no hay otro país”, añade el portero. Maier también destaca la filosofía del Athletic al permitir que únicamente juegue gente de su territorio y la compara con la filosofía alemana al afirmar que los vascos y los bávaros no permiten que se les desplace.
Un guardameta conocido por haber tenido una carrera exitosa tanto como jugador como entrenador de porteros. No obstante, siempre será recordado por ser la otra cara de la moneda en el famoso penalti de Panenka. Maier, quien sufrió aquel gol con tanta repercusión, actualmente bromea sobre aquella acción. “Fue una jugada un tanto sucia, poco deportiva”, bromea el portero.
Fuente de imagen: www.fcbayern.com
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