Análisis Opinión

Desastre a largo plazo

Volviendo al pasado, cuando Meriton quería y finalmente compró el Valencia C.F, su frase más repetida era “Es una proyecto a largo plazo”, esta frase parecía el lema o símbolo de su proyecto. Siendo sinceros, la mayor parte de la afición –incluido yo- deseaba que se produjera la compra, y confiaban en ellos para volver a hacer grande al Valencia, pero nadie imaginaba el desastre que se produciría posteriormente.

La primera temporada del Valencia a manos de Meriton fue de ensueño, fichajes de nivel mundial (Rodrigo, Negredo, Enzo Pérez…); récord de puntos con 77 y la clasificación para la ansiada Champions League. Aunque cabe recalcar, que no todo fue buena armonía durante esa temporada; la discutida destitución de Pizzi, los problemas internos entre Rufete, Ayala y Nuno, la contratación de un entrenador inexperto como Nuno y los fichajes a precios desorbitados.

La temporada siguiente –la segunda de Meriton- fue cuando empezó el declive y el principio de su posible fin. El fichaje de Aderlan Santos por 9´5 millones fue el hecho que encendió la mecha del divorcio entre la afición valencianista. Los malos resultados durante la temporada y las malas decisiones provocaron la salida de Nuno y Gary Neville.

La tercera temporada, la actual, ha incrementado el enfado de la afición valencianista con Meriton y con razón. Teniendo la esperanza de que se arreglasen los errores y revertir la situación, Meriton fue incapaz de mejorar la situación, y para muchos mostrar indiferencia para arreglarlo.

Esta temporada, la contraposición hacia Meriton no solo es por temas futbolísticos, sino también por asuntos extra futbolísticos. Respecto a los temas futbolísticos, la decisión dejar el equipo al mando de Pako Ayestarán enfadó mucho a la afición, porque se consideraba que en la situación en la que encontraba el Valencia se necesitaba un entrenador con mayor experiencia. La afición no se engañó y Ayestarán fue destituido en la cuarta jornada, tras no conseguir ningún punto de los 12 posibles.

Meriton pareció escuchar las plegarias de la afición y Pitarch decidió contratar a un entrenador con experiencia, Prandelli. Pero, siendo sinceros, Prandelli fue otro fiasco, vino con un discurso fuerte y prometedor pero el que acabó ‘fuori’ fue él. Actualmente de entrenador está Voro, el cual, es la apuesta de Peter Lim para final de temporada.

Respecto a los temas extra futbolísticos, la situación no es mucho mejor. A nivel económico el Valencia está en apuros ya que, como se ha observado recientemente le ha resultado difícil pagar 3 millones por Orellana y está amenazado por una posible multa de la UE.

La relación con la afición no sigue igual de mal, sino peor. Meriton, pero sobre todo Vidigany han enfadado a gran parte de la afición por la medida de expulsar a las personas mayores de 30 años de la grada de animación, Curva Nord, aunque esta decisión innecesaria, no ha sido la última que ha realizado Meriton, ya que recientemente han destituido a Kempes como embajador del club, afirmando que no puede realizar su labor desde Estados Unidos. Lo peor de esto es que Peter Lim, mayor accionista del Valencia, no ha pisado Mestalla más de cinco veces.

Esperemos que Meriton cumpla sus promesas y vuelvan a convertir al Valencia en uno de los más temidos de Europa, y si se ven incapaces, la mejor solución es una venta.

Fuente: SuperDeporte 

Imagen destacada via: http://www.plazadeportiva.com/

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