Entramos en este nuevo año 2017 y, como siempre, toca echar la vista atrás y rememorar lo que el 2016 ha sido para nosotros, en nuestro caso limitándonos a lo puramente baloncestístico, más concretamente, recordando lo que nuestros Lakers nos han dejado en estos 366 días.El año comenzó con los angelinos sumidos en una de las peores temporadas de su historia, si no la peor, con un entrenador que no dejaba a sus promesas desarrollarse por completo, que además no permitía a Swaggy P jugar por diferencias personales, con un Kobe Bryant que ni estaba ni dejaba de estar y que entre tanto cobraba el salario más alto de la liga y un largo etcétera. Lo que viene a ser un drama, vamos.
La primera fecha clave fue el 29 de abril, fecha en la que la franquicia angelina llegó a un acuerdo con el segundo entrenador de los Golden State Warrior, Luke Walton, entrenador que logró durante la ausencia de Steve Kerr el mejor inicio de la historia de la liga (28-0). Sin duda, el coach con pasado laker parecía el más indicado para ocupar el puesto que hasta ahora ocupaba Byron Scott. Este entrenador imprime un ritmo alto en su juego, lo que parece lo más adecuado para estos jóvenes Lakers.
La segunda fue el 23 de junio, o el draft de la NBA. Aquí, los Lakers eligieron a Brandon Ingram dejando pasar a otros grandes jugadores como Buddy Hield o Thon Maker. El jugador procedente de Duke fue duramente criticado por su falta de corpulencia y peso, aunque sus centímetros y gran envergadura parecen cualidades que le darán la posibilidad de hacerse un nombre en este mundillo. Hay que entender que este jugador nació el año 1997, es decir, tiene tan solo 19 años, por lo que tiene margen para crecer tanto en cuanto a centímetros como en cuanto a kilogramos. Llegados a este punto, los fans de los de oro y púrpura estamos muy ilusionados con nuestro rookie, aunque sus números no sean nada del otro mundo, se le ve un jugador maduro y capaz de liderar el equipo en los años venideros.
La temporada comenzó bien para los nuestros, logrando un balance de 10-11 en los primeros 21 partidos. Jugaban un juego rápido, alegre, buscando tanteos altos y sin perderle la cara a nadie. Algunos (y entre ellos me incluyo) nos permitimos soñar, por qué no, con una posible participación en los PlayOffs. Sin embargo, con la lesión de tobillo de D’Angelo Russell los nuestros cayeron en picado hasta llegar al 13-25 que tenemos a día de hoy.
Sin lugar a dudas, Kobe Bryant se merece un párrafo aparte en nuestro resumen. Tras varios años renqueante, llegó el momento de decir adiós para el posiblemente mejor Laker de la historia. Su despedida fue, cuanto menos, legendaria. Se fue dejándonos una actuación para el recuerdo, un reflejo de lo que su carrera fue. Anotó 60 puntos en más de 50 tiros, 13 en los últimos minutos y dejando a los Jazz fuera de los PlayOffs. En cuanto a The Black Mamba nos encontramos con sentimientos contrarios, por una parte nos apena que nos deje esta leyenda, pero por otra (al menos en mi caso) creemos que ya era hora de pasar página y dejar paso a nuevas generaciones.
De lo que no hay duda es que este año 2016 va a marcar un antes y un después en el devenir de la organización. Contamos con piezas para construir un gran equipo en los próximos años, además del espacio salarial para poder traer algún agente libre el próximo verano.
Foto via Daily Mail.
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